El sistema del mundo siempre ha querido desmeritar y diluir o incluso “conciliar” la Palabra de Dios con su sistema.
Esto lo vemos en el inicio de los tiempos. Ya en Génesis 3.1- 5, vemos a Satanás contradiciendo a medias el único mandamiento de Dios, en ese entonces, para con la raza humana. Desde ese momento y durante toda la historia de la redención, en toda la Escritura, vemos al enemigo tratando de diluir el mensaje de Dios.
Vemos eso en la vida de los patriarcas, los profetas, los apóstoles y la primera Iglesia, todo esto registrado en la Biblia. Luego la historia nos cuenta, y Pablo advirtió, que entrarían “lobos rapaces” para desmeritar la Palabra. El apóstol Pablo nos advierte en Colosenses 2.8 “Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas… conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo”. En Hechos 20.29-32 se nos da la fórmula para contrarrestar esos ataques “Dios y la palabra de su gracia”.
El ataque básico del enemigo es siempre disuadir a la gente a “no ser tan estricta” o a “acomodar” la Palabra de Dios al sistema que él gobierna. Hoy vivimos, tal vez, uno de los peores momentos en ese aspecto. Hoy, el cristianismo es el sector más perseguido del mundo por todo lo que está ocurriendo en países de extremismo islámico, y también en Occidente, aunque no se persiga físicamente a los cristianos, están tratando de coartar su influencia y su libertad de expresión, desmeritando su mensaje bíblico, ridiculizando sus valores morales y tratando por todos los medios posibles de desvirtuar la Biblia en todos los frentes, especialmente en la educación, la política y la cultura. La represión y censura de hoy es la persecución de mañana.
Paradójicamente, vivimos en sociedades altamente religiosas. Europa se ha caracterizado por seguir mayormente la línea de la Reforma Protestante y Latinoamérica la Católica Romana, también con mucha fuerza en décadas anteriores en España e Italia. Pero, en general, en Occidente la religión cristiana en general ha dictado por siglos la cultura y la moral.
¿Cómo llegamos a lo que estamos viviendo ahora y cuál es nuestra responsabilidad? ¿Qué pasó con la Iglesia? ¿Cómo se inicia, a grandes rasgos, el proceso de secularización que estamos viviendo? Cuando la Iglesia sucumbe o negocia con la Palabra de Dios, pues, el pueblo, que es mayoritariamente religioso, se estanca espiritualmente y se enfría (son procesos de décadas). Una vez que la Iglesia y la sociedad están frías espiritualmente, la gente se rige por criterios carnales y humanos como: el divorcio, la inmoralidad sexual, el relativismo, etc. Estos se van haciendo tan “normales” que la sociedad necesita “legalizarlas”. Por poner un ejemplo, y sin juzgar a los que están en esa situación, porque hay casos y casos: el divorcio.
Cuando la gente que dice ser cristiana, como en los países occidentales, pierden su espiritualidad y dejan de valorar la fidelidad al pacto matrimonial, esto hace que cada vez haya menos amor y compromiso con la pareja. Esto, sumado a todos los antivalores que la sociedad nos ofrece, cada vez más, contribuye para que haya más divorcios, hasta que son tantos y es tan común que se legalizan.
Para que ocurra lo mencionado (las legalizaciones) tienen que entrar en debate estos temas a nivel político. La política está formada por líderes que representan a ese pueblo adormecido espiritualmente. Una vez que se legalizan, estas son enseñadas a las masas y ahí entran a la educación:escuelas, colegios y universidades. Para que estén presentes en esos sectores ya es cuestión de tiempo, y luego será una cultura aceptada y practicada de forma legal y “normal”.
¿Quién finalmente es el responsable de esta debacle? Una Iglesia tibia con un liderazgo complaciente.
Anuncian concierto por los 130 años del colegio Dante Alighieri
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El pianista italiano Massimo Folliero y la Orquesta Sinfónica de la Policía Nacional subirán al escenario del Teatro Municipal de Asunción “Ignacio A. Pane” (Presidente Franco y Alberdi), el viernes 14 de marzo, a las 19:30, para celebrar el aniversario 130.° del colegio Dante Alighieri. Con un repertorio de temas clásicos italianos, paraguayos e internacionales rendirán tributo a la hermandad entre Italia y Paraguay. Las entradas se reservan sin costo por WhatsApp al 0974 812022.
El Dante Alighieri, fiel a su tradición de promover la educación artística y cultural, celebra un nuevo aniversario con un concierto abierto al público. El maestro Massimo Folliero, amigo de la institución, regresa por segunda vez al país para ofrecer un viaje musical único por Italia, Paraguay y el mundo. Junto a la Orquesta Sinfónica de la Policía Nacional, dirigida por el maestro Óscar Barreto, interpretará un repertorio que abarca desde los himnos nacionales de Paraguay e Italia, hasta obras clásicas y populares.
Orquesta Sinfónica de la Policía Nacional. Foto: Gentileza
“Cada aniversario nos llena de emoción y orgullo. No es fácil sostener una institución educativa por tantos años y nuestra escuela superó muchas situaciones difíciles. Fue cerrada dos veces: una vez a principios de 1900, por cuestiones económicas; y otra, durante la Segunda Guerra Mundial. También la pandemia (de covid) impactó fuertemente, pero aquí estamos, con muchas ganas de crecer en todos los aspectos manteniendo nuestra excelencia educativa”, comentó Viviana Ruggero, presidenta de la Sociedad Dante Alighieri del Paraguay.
La Scuola Italiana Dante Alighieri, fundada el 14 de marzo de 1895, en Asunción, por la Società italiana di Mutuo Soccorso y la Società Femminile di Beneficienza Margherita di Savoia, ha contribuido de manera fundamental a la formación de varias generaciones de paraguayos. Actualmente cuenta con dos sedes: la histórica casa del centro de Asunción, que ha crecido cinco pisos, y un nuevo local en Fernando de la Mora.
Sigue la obra teatral “La isla, territorialización de en alta mar”
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La obra teatral “La Isla, territorialización de En alta mar” del escritor polaco Slawomir Mrozek (1930-2013) volvió a escena a pedido del público, en el local de Casa Karakú, ubicado en Montevideo 1025 casi Manduvirá, en Asunción. El actor Víctor Sosa dirige al elenco conformado por Rubén Zapattini, Luis Gutiérrez y Fredy Gonzales, en las funciones previstas hoy y mañana a las 20:30, con entradas a G. 30.000; reservas al 0961603490.
Esta comedia, mezcla de absurdo y reflexión sobre la naturaleza humana, desafía al público con una historia donde la supervivencia y la lucha por el poder se combinan en una atmósfera de comedia y drama absurdo. Tres hombres, Chacho, Fabri y Justino, se encuentran en medio de un Chaco incendiado, atrapados por las circunstancias extremas de un naufragio. Frente a la escasez, deben decidir quién se sacrificará para alimentar al grupo.
Entre discusiones manipuladoras, los personajes enfrentan la crudeza de la jerarquía social, las dinámicas de poder y la explotación de los más débiles. A través de humor negro y un planteo audaz, la obra nos invita a reflexionar sobre los aspectos más oscuros del comportamiento humano en situaciones límite.
La utilización diaria del guaraní ha disminuido drásticamente, pasando del 38 % al 5 % en tres generaciones, situación que enciende algunas alarmas en torno al futuro del ava ñe’ê
Si bien es alto el porcentaje de la población que habla los dos idiomas oficiales del país, guaraní y castellano, los especialistas insisten en que hay que hacer un poco más para consolidar la presencia de la lengua vernácula. Aquí un análisis de los datos y percepciones sobre las acciones a seguir para preservar este valioso patrimonio único en el mundo.
“Se nos hace difícil ahondar más en la encuesta, porque lo que preguntamos es cuál es el idioma mayormente hablado en el hogar”, explica Norma Medina, directora de Censos del Instituto Nacional de Estadística (INE), a la hora de analizar qué lengua usamos más los paraguayos.
Es diferente en el censo, “donde se pregunta de manera individual los idiomas que habla la persona”, cuenta para indicar que penosamente “el uso del guaraní va bajando”.
Según datos de la Encuesta Permanente de Hogares Continua (EPHC) 2024, el 38,7 % de la población paraguaya de 5 años y más (equivalente a 2.106.168 personas) habla guaraní y castellano en su hogar.
Por su parte, el 30 % (1.636.287 personas) se comunica mayormente en guaraní, mientras que el 28,5 % (1.554.939 personas) utiliza el castellano.
Además, un 2,4 % de la población (129.765 personas) emplea otro idioma como principal (inglés, portugués, francés, alemán, japonés, coreano, árabe, polaco, ruso, ucraniano y otros idiomas indígenas), destaca el estudio.
Vale recordar que en el país, además del guaraní, existen 19 lenguas indígenas pertenecientes a diferentes pueblos originarios, como los enxet, nivaclé, ayoreos y maskoy, entre otros, muchas de ellas en peligro de extinción.
Norma Medina, directora de Censos del INE
TENDENCIA DECRECIENTE
Los números del Censo son variables, pero marcan una tendencia decreciente en la población que solo habla guaraní, que pasa de un 27,7 % en 2002 a un 12,1 % en el último de 2022.
Además, un reciente estudio realizado por el docente y gestor cultural Arnaldo Casco Villalba parece confirmar estos guarismos. En él, a partir de una encuesta aplicada a un total de 1.500 ciudadanos mayores de 18 años, realizada en Google Forms, “se buscó medir la evolución en el uso de idiomas, principalmente el castellano y guaraní, en las últimas tres generaciones en el país. Los datos reflejaron tres tendencias muy claras: cada vez son más las personas que usan con mayor frecuencia el castellano y las que se comunican usando ambos idiomas (guaraní-castellano); sin embargo, el uso frecuente del guaraní tuvo una declinación importante en las dos últimas generaciones”, comentó el lingüista.
La utilización diaria del guaraní ha disminuido drásticamente, pasando del 38 % al 5 % en tres generaciones, situación que enciende algunas alarmas en torno al futuro del ava ñe’ê.
Tras los resultados de su trabajo, Casco Villalba entiende que “se debe hacer una gran tarea de rescate del guaraní real, funcional, coloquial, esa variante que justamente el hablante la sigue manteniendo viva y trabajar desde esa variante la difusión, estandarización, promoción, todas las políticas lingüísticas necesarias para seguir manteniendo su uso, incluso lograr que trascienda sus propias fronteras lingüísticas, que son los ámbitos tradicionales de uso. Una de las maneras de apostar por su supervivencia es a través de las nuevas tecnologías disponibles, el internet, las redes sociales, la inteligencia artificial, etc.”, apunta.
Para Dionisio Fleitas, de la Comisión Nacional de Bilingüismo del Ministerio de Educación, “incluso podemos tener dudas de las encuestas porque muchas veces la gente tampoco nos quiere decir con certeza de que habla solamente guaraní. Entonces, dice que habla guaraní y castellano, pero no tenemos de por medio un test de competencia lingüística que nos pueda asegurar”, señala. A pesar de ello, siente que “sirve y mucho la respuesta que se recibe de la gente”.
“NUEVO” GUARANÍ
Con 50 años de experiencia en la enseñanza y difusión de la lengua, el profesor David Galeano Olivera considera que “hay un nuevo guaraní, uno renovado, rejuvenecido, que uno puede ver saliendo y trabajando a nivel nacional. Hoy en día con las redes sociales, especialmente Tiktok, puede verse una cantidad impresionante de gente que se expresa en guaraní. También hay artistas, intelectuales y políticos paraguayos que están en el exterior que están usando el idioma”, apunta.
Lo hace reflexionando lo siguiente: “Partamos de la base de que el guaraní es el idioma más hablado en el Paraguay. Yo sostengo que el 80 % del Paraguay sigue hablándolo, bien o mal, como quiera, pero habla guaraní”.
De su lado, para Mauro Lugo, presidente de la Academia de la Lengua Guaraní, “hace falta actitud positiva hacia la lengua de parte de los hablantes y de todos los ciudadanos, romper con el complejo lingüístico (herencia fatal del colonialismo), entender que en el mundo no hay ninguna lengua inferior, sino diferente, y que cada lengua representa una cultura, una manera de ser y de vivir, de ver y sentir el mundo de una manera singular”.
Entiende que “hace falta una mentalidad distinta y respetuosa hacia el guaraní, principalmente de parte de las autoridades y sectores empresariales, de modo que se invierta para la creación de dibujos animados, canciones infantiles y juveniles, películas, promoción de lecturas, elaboración de materiales didácticos para todos los niños y jóvenes del país; definición de un modelo de guaraní paraguayo, que sirva para la comunicación cotidiana, para el empleo de una lengua real”, expone.
QUÉ HACER
La necesidad de instruir en el idioma nativo a los niños guaranihablantes aparece como una de las claves para fortalecer el bilingüismo.
Para Casco Villalba, “está más que demostrado que la alfabetización se debe realizar en la lengua materna del educando para poder fijar y asegurar los primeros pasos. Es más que necesario atender la alfabetización en guaraní a los niños hablantes para luego ir adquiriendo el aprendizaje de otra u otras lenguas”.
En coincidencia, Dionisio Fleitas describe: “El niño habla guaraní hasta los 5 años, se va a la escuela y se encuentra con una lengua diferente a la que mejor maneja. Se siente incómodo, menospreciado. Tenemos que respetar la lengua materna del niño guaranihablante porque hoy por hoy sigue alfabetizándose en la lengua castellana. A pesar de que tenemos un programa de educación bilingüe desde 1994, sin darnos
cuenta caemos de vuelta en el programa bilingüe de transición, donde finalmente se busca llevar hacia el monolingüismo en castellano”.
Por su parte, Mauro Lugo entiende que “se deberían respetar los derechos lingüísticos y posibilitar a los niños que reciban la educación en su primera lengua, sin negarle el derecho de ir aprendiendo paulatinamente su segunda lengua, hasta llegar a un bilingüismo coordinado, con proyección a aprender otras lenguas, de modo que sean ciudadanos paraguayos y del mundo”.
A su vez, David Galeano Olivera piensa que “el niño guaranihablante aprende castellano a los golpes, a los tumbos, porque no existe una metodología para que estos niños aprendan castellano. Eso se puede percibir en el hablar, tenemos problemas de concordancia porque en el guaraní no existe la idea de la concor dancia”, ejemplifica. “Se nos metió en la cabeza que el guaraní es difícil y se creó una imagen falsa”, refuerza.
Propone entonces hacer una enseñanza bilingüe con “un 85 % de la primera lengua y 15 % de la segunda en el primer año. En el segundo, con proporción de 75 a 25 %; en el tercero, 65 a 35 % y así al llegar al sexto grado ya estamos con un 50 y 50. Las criaturas pueden hacerlo”, asegura.
Dionisio Fleitas, de la Comisión Nacional de Bilingüismo del MEC
INTELIGENCIA ARTIFICIAL EN GUARANÍ
Para David Galeano Olivera, es imprescindible una apuesta desde la educación oficial a las nuevas herramientas tecnológicas y el internet: “Tenemos información suficiente en Wikipedia Guaraní, algo que empezó con tres, cuatro páginas y se convirtió en una feroz enciclopedia. El mismo caso con el navegador Mozilla Firefox, que nosotros llegamos a traducir con más de sesenta y cinco mil términos del castellano y el inglés al guaraní, que está allí como Firefox Guaraní o Aguaratata”, recordó.
También está en función experimental “el traductor de Google, que ya está funcionando pasando al guaraní más de cien idiomas, algo que no teníamos diez o veinte años atrás y que hoy un niño tiene al alcance de la mano en su celular”, señala.
Comentó a su vez que “estamos trabajando insistentemente con el ingeniero Miguel Gaspar, en el Ateneo de Lengua y Cultura Guaraní, en el tema de la inteligencia artificial. Prácticamente cada día estamos cargando guaraní al ChatGPT y a Gemini. Le hacemos las preguntas sobre algún tema, nos responde en guaraní. Cuando descubrimos alguna respuesta incorrecta, una mala construcción, automáticamente le corregimos. Es un trabajo lento que se hace a pulmón, pero que se podría mejorar con una inversión estatal a favor de la educación”.