- Por el Dr. Juan Carlos Zárate Lázaro
- MBA
- jzaratelazaro@gmail.com
Muchas de las mipymes se lanzan al mercado a emprender su negocio con la idea concebida, basada solo en la intuición y no con el apoyo del conocimiento y aprendizaje de herramientas imprescindibles que le permitan competir en un mercado cada vez más exigente y cambiante, en donde las empresas ya no ponen su focus en los productos sino en los clientes cuyos gustos y tendencias son cambiantes y vertiginosas.
La falta de capacitación y sobre todo conocimientos de los principales componentes que hacen a una buena educación financiera de los emprendedores es un motivo que lleva muchas veces a la empresa a no poder llevar a buen término una buena idea por falta de manejo adecuado y sobre todo conocimiento de las variables que siempre deben ser consideradas de antemano.
Abordar el inicio de una empresa sin una hoja de ruta delineada razonablemente e intentar ir sorteando por el camino los escollos que se van presentando pretendiendo poder hacer frente a las distintas erogaciones que se deberán realizar para operar y subsistir, puede tener consecuencias negativas, pues por más que estas empresas no tengan la misma complejidad dentro de la estructura organizacional versus las de tamaño corporativo, siempre están presentes factores económico-financieros que se los deben tenerlo en cuenta.
De allí parte la importancia de contar con una buena educación financiera antes de la puesta en marcha de cualquier emprendimiento. La herramienta primaria de mayor relevancia lo constituye el manejo de un presupuesto que permita la ejecución de las actividades, y el control de ingresos y gastos en que va incurriendo la empresa. En ningún caso se ha de mezclar el presupuesto del emprendedor con el de la empresa. Deben ir siempre por cuerdas separadas.
La mayoría de nosotros preparamos regularmente nuestro propio presupuesto a fin de determinar hasta cuánto podemos gastar en función a nuestros niveles de ingresos actuales y en perspectiva. Una empresa funciona de la misma manera sea del tamaño que lo fuere adquiriendo incluso mayor relevancia en las mipymes, dado que muchas veces el capital operativo inicial salen de los bolsillos de sus propietarios.
Adquiere relevancia que sepamos mantener un equilibrio razonable entre ingresos/egresos y evitar sobre endeudarnos para no tener que pasar malos ratos ante una coyuntura desfavorable, más aún en épocas en que la crisis financiera pueda acentuarse, ya que afecta a todos directa o indirectamente, impactando en una disminución de los niveles de facturaciones, lo cual “golpea” a los gastos operacionales y administrativos y por ende a los niveles de rentabilidad de las empresas, traducidas en una menor performance de su gestión económica.
Un axioma de relevancia que debe tener en consideración todo emprendedor que desee embarcarse en una actividad de negocios determinada, es que tengan un conocimiento del ramo al cual desean dedicarse.
Muchas veces por el simple hecho de ver que otras personas están generando buenos niveles de ingresos y una creciente participación de mercado queremos emularlos, pero en contrapartida no contamos con el componente primario que lo constituye el necesario conocimiento de dicho segmento de negocios. El hecho de que a uno o más emprendedores les vaya bien el negocio, no significa que igual suerte los tendremos todos.
Tener un conocimiento de cómo “se mueve el mercado”, la competencia, cuales son los principales segmentos que los vienen atacando, cual es la estrategia de marketing aplicada, además de la tenencia de una logística adecuada, son algunos de otros tantos aspectos que se deben sopesar adecuada y racionalmente antes de emprender el negocio.
Antes que pretender absorber varios rubros de comercialización, para el caso de las mipymes, es mejor observar de cerca el comportamiento que vienen teniendo ciertos segmentos específicos y auscultar las posibilidades de poder servir al mismo, pues se dan casos que empresas corporativas de mayor porte no se interesan por determinados segmentos y allí podrá entrar una mipyme a tallar en forma efectiva para lograr buenos niveles de negocios y rentabilidad.