Está concluyendo julio luego de un primer semestre cuyos resultados en la actividad económica general han sido malos, con retracción económica, alta inflación y datos preocupantes sobre la pobreza. El clima político también ha desmejorado como consecuencia de la pelea interna de los colorados y los preparativos de los partidos de oposición que quieren buenos números para las elecciones de abril del 2023. Aparte de estos factores internos, la invasión rusa a Ucrania ha hecho tambalear la economía mundial cuyas consecuencias se están viendo en numerosos elementos que inciden en la inestabilidad general.
Las previsiones del Banco Central del Paraguay (BCP) hablan de un modesto crecimiento del 0,2% para la economía del país durante este año. El Banco Mundial, por su lado, prevé un alza de 0,7%, la más baja entre los demás países de la región sudamericana, ya que Brasil crecerá 1,5%, Uruguay 3,3%, Bolivia 3,9% y Argentina 4,5%, según el organismo internacional.
Pero hay datos que indican que en este segundo semestre mejorará el panorama económico luego de los golpes del inicio de año. Ya que se estima que el cultivo de los principales renglones de la producción, especialmente la soja, tendrá un fuerte repunte frente a las malas cifras de la cosecha anterior.
La muestra económica marcó varios récords en el volumen y el valor de los negocios que se concertaron en la ocasión. La 76ª Exposición Nacional Ganadera recaudó inicialmente más de 14.000 millones de guaraníes, cifra que incluso podría ser superior cuando se tengan los balances finales. Una marca nunca antes alcanzada.
En la Expo Rueda, en que se hacen acuerdos comerciales no pecuarios, se alcanzó un valor de negocios estimado en 650 millones de dólares, entre las ventas efectuadas e intenciones de compras. En la anterior versión se habían concretado negocios solo por 190 millones de dólares, por lo que el aumento es de 242%.
Una novedad importante que ayudó a los mayores volúmenes de venta y compra fue la presencia, por primera vez, de las micro, pequeñas y medianas empresas, que en nuestro país conforman uno de los más importantes grupos de la actividad económica.
Los buenos números alcanzados en la muestra más importante del país impulsan al optimismo, pues no solo se hicieron más negocios que en años anteriores, sino que tuvo también la mayor presencia de público. En esta ocasión se contabilizaron 791.382 visitantes, una cifra superior a las registradas en años anteriores, de acuerdo con los organizadores.
El excelente desempeño de lo acontecido en la última versión de la Expo puede ser el inicio del mejoramiento económico que se aguarda, el impulso que se está necesitando. Sobre todo porque luego de los dos años de pandemia, la muestra demostró un vigor extraordinario. Que podría ser un indicador de lo que vendrá en el segundo semestre y más adelante.
En el Paraguay se tiene que trabajar con mucha fuerza en todos los sectores económicos para mejorar la situación y encaminar al país hacia la recuperación, que por los desaciertos gubernamentales se ha venido retrasando. Para ello no hay otra alternativa que impulsar con decisión a los diferentes grupos que intervienen en la generación de la riqueza, creando las mejores condiciones para esa enorme tarea. Y en ese capítulo, el papel del Gobierno es fundamental. Para encaminar el rumbo, dar las garantías para los que producen y otorgar seguridades en la política económica para que se pueda llegar al objetivo. La intervención del Estado es irremplazable para ofrecer el marco necesario. Por ello es que no se podrá prescindir del apoyo de las instituciones estatales. Incluso, si hace falta, hay que exigir que dejen sus distracciones políticas para hacer frente a los desafíos más importantes.
En el momento histórico que se vive, es necesario trabajar duro para salir del estancamiento y culminar el año con mejores números, tanto en la producción económica, como en la disminución de la pobreza y el aumento del empleo. Ante ese reto no hay más alternativa que estar unidos, dejar de lado las confrontaciones políticas para las elecciones venideras. Y pelear juntos en la única lucha que nos concierne a todos como obligación, que es recuperar la economía del país.