Paraguay avanza en el fomento del amor y respeto a la literatura no solo en el sentido de captar la atención de los lectores, sino en brindar un justo reconocimiento a los que fomentan y cultivan el hábito literario con el Premio Nacional de Literatura, que lleva ya varios años distinguiendo a los escritores que presentan una obra maestra. En la edición 2021, este importante reconocimiento recibió la escritora paraguaya Susana Gertopán por su obra “La casa de la calle 22″.

El jurado del Premio Nacional de Literatura 2021 seleccionó esta obra por su estructura poliforme, el fluido desarrollo del argumento, el ágil manejo de los planos psicológicos, el acertado perfil de los personajes que concentran pasiones y emociones, la sugestiva descripción de lugares interiores, exteriores y ciudades donde suceden los episodios. Para conocer más a la galardonada y su obra, “Fuego cruzado” la tuvo esta noche como invitada especial durante el programa que fue emitido por el canal GEN.

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Gertopán sostuvo que el tema de género, es decir, ser escritora o escritor, le resulta igual. Indicó que para ella no existe diferencia entre ser hombre o mujer que cultiva la escritura. Aclaró que para ella es vital escribir y que no podría vivir sin estar haciéndolo, ya que lo primordial para ella es escribir sin preguntarse si tendrá o no lectores después.

“Lo primero es escribir, yo no puedo vivir sin escribir, para mí la literatura es vital, como comer, como dormir. Mi vida gira en función a la escritura. Mi hábitat está preparado para que yo pueda escribir. A mí nunca se me planeó como problema escribir y no tener lectores, porque si hay lectores o no hay lectores, yo igual voy a escribir”, expresó.

Susana Gertopán sostuvo que no puede vivir sin escribir. Para ella la literatura es vital, es como comer o dormir. Su vida gira en función a la escritura. Foto: Leandro Veragua.

En Paraguay sí hay lectores

Con esta disyuntiva, aseguró que es una mentira que en Paraguay no existan lectores, reconoció que tal vez no sea la cantidad ideal en función a la cantidad de la población. Pero señaló que tampoco se hizo una encuesta al respecto. No obstante, indicó que es una preocupación la desidia que hay en las casas en cuanto a leerle a los niños, que se les culpa a las escuelas, a las instituciones, pero en los hogares se perdió la costumbre de lectura.

“Es una costumbre andar con un libro como objeto acompañante o llevar a la cama para leer antes de dormir. Igual que el hábito de leer el diario, antes cuando uno se levantaba, mientras tomabas el café leías el diario. Hoy en día eso se terminó”, lamentó.

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Redes y falta de interés en los jóvenes

Gertopán dijo que en cierta medida se exagera un poco al acusar a las redes sociales como las responsables de desmotivar el hábito en la lectura de los jóvenes. “Pero también yo les culpo a los padres, porque no se ocupan de los niños. Es más fácil darle un aparatito, por ejemplo en el auto mientras viajan los niños se inquietan y antes de contar un cuento, cantar una canción o jugar alguna cosa, le ponen la tablet o el celular y los niños se quedan y están ahí”, dijo.

Satisfacción por el reconocimiento

Por otra parte, la entrevistada habló de su novela ganadora, destacando primeramente la importancia de recibir este reconocimiento por parte de las autoridades nacionales como escritora paraguaya, por el hecho de que en este país nació, vive, escribe y narra sus historias, están las voces de sus espectros y reconocen la voz de sus fantasmas, explicó.

“El reconocimiento dentro de ese ámbito, en medio de esa atmósfera es doblemente satisfactorio. A mí me han traducido en varios idiomas, y he participado del lanzamiento de esos textos y son presentaciones muy interesantes, pero yo salgo de ese ambiente y yo no le reconozco a nadie, yo no sé quién me lee, no sé quién escribe sobre mí o hace un ensayo sobre mi literatura”, explicó.

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Agregó que: “Varios de mis colegas me cuestionaban si aspiraba al premio Cervantes y otros galardones internacionales, y si bien son aspiraciones claras, el de mayor importancia para la escritora era el reconocimiento a nivel local con el Premio Nacional de Literatura del Paraguay”.

Historia detrás de la novela ganadora

Respecto a su obra literaria, señaló que tiene un componente familiar, la búsqueda. Si bien no es una obra biográfica, está basada en la vida de su abuela. “Me llevó a escribir luego de una búsqueda intensa que hice sobre la vida de mi abuela. Yo entendí tardíamente lo que significa la palabra “criar”. Criar no es con la persona con quien vivís, yo siempre viví con mis padres y fines de semana o vacaciones pasaba con mis abuelos. Pero entendí que la palabra criar tiene que ver con lo que la otra persona te transmitió a lo largo de la vida”, explicó.

De parte de sus abuelos heredó una identidad, sobre todo de la abuela materna, porque ella le enseñó costumbres y tradiciones. Aunque su abuela poco hablaba de su vida pasada y solo la vio en algunas ocasiones al ojear un álbum donde solo había tres fotos, hasta que un día se comenzó a cuestionar sobre el pasado de su abuela, que era europea.

Foto: Leandro Veragua.

“Ella nunca contó sobre su pasado, yo escribí: Todo pasó en setiembre, que es un vínculo entre una abuela y una nieta, y ahí se me despertó la curiosidad por investigar su vida. Fue así durante 2 años, insistentemente, hice averiguaciones. Incluso viajé, estuve en Francia en el Museo del Holocausto a ver si encontraba su apellido, en Berlín. Vine a Buenos Aires, al Museo del Inmigrante y nada. Pero aquí también recorrí muchísimas instituciones hasta que al final en Identificaciones accedo a datos de cuando se nacionaliza y eso me lleva a averiguar que al final no era de nacionalidad polaca, sino lituana”, indicó.

Fue así que consiguió en Lituania mayores datos sobre su familia y fue recibiendo vía correo tradicional fotos, documentos sobre el pasado de su abuela, así como el lugar donde nació y todo su árbol genealógico. Eso le motivó nuevamente a viajar hasta ese país, donde fue a encontrar su casa, sus raíces y eso le sirvió como fuente de inspiración para su obra ganadora.

Susana Gertopán indicó que su abuela logró salir de Europa antes de la Segunda Guerra Mundial, logrando huir a tiempo del gueto de Lituania para salvarse porque el lugar ya estaba siendo tomado por los nazis.

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Nuevos proyectos

Gertopán anunció como primicia que próximamente estará presentando una nueva novela, que ya la terminó y está en proceso de corrección. Luego falta la diagramación y tal vez para finales de febrero estaría lista para salir al público. Sobre esta obra, comentó que es un poco diferente a la anterior porque enfoca el aspecto del exilio político en Paraguay.

En tanto, ya está trabajando en otra novela que se centra en la relación de pareja, en un matrimonio ya mayor y la necesidad de acudir a lo esotérico para la sobrevivencia. En cuanto al tiempo que le dedica a escribir al día, señaló que lo habitual es entre 10 a 12 horas, no acostumbra escribir a la noche, a no ser que le surjan algunas ideas, por lo que entonces toma apuntes a mano.

El pasado 15 de diciembre autoridades del Poder Ejecutivo y Legislativo hicieron entrega del galardón Premio Nacional de Literatura a Susana Gertopán por su obra "La casa de la calle 22". Foto: Gentileza.




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