La emblemática obra de Arthur Miller Brujas de Salem se transforma en La Maldición de Salem en esta adaptación única dirigida por Ariel Galeano. La puesta en escena, protagonizada por los estudiantes de segundo año de la carrera de Actuación del Instituto TIA Maneglia Schembori, no sólo revive la tragedia de la caza de brujas en la Puritana Salem, sino que también la reinterpreta con la frescura y la mirada única de estos jóvenes artistas.

Considerada un clásico de la literatura teatral mundial, la obra de Miller narra los trágicos eventos del juicio de las brujas en Salem, en un contexto marcado por el miedo, la paranoia y el fanatismo religioso. A través de sus personajes intensos, La Maldición de Salem denuncia los mecanismos de control social y la histeria colectiva, presentando una historia que sigue siendo relevante.

En esta versión, los estudiantes se sumergen en los complejos personajes creados por Miller, ofreciendo una interpretación cargada de emoción, tensión y conflicto. El elenco, compuesto por jóvenes actores en formación, logra transmitir con pasión un mensaje poderoso sobre las injusticias sociales y la manipulación por parte de las figuras de poder.

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La obra representa una oportunidad única para ver a los futuros profesionales del teatro desplegar su talento en uno de los escenarios más emblemáticos de la ciudad de Asunción. La puesta en escena promete una experiencia inolvidable que no sólo cautivará al público, sino que también invitará a la reflexión sobre los temas atemporales que aborda.

Las funciones serán el 19 y 20 de noviembre, a las 20:00 horas, en el Arlequín Teatro. Las entradas están a G 50.000 en boletería.

Invitan a no perderse ¡esta vibrante adaptación de La Maldición de Salem! Una obra llena de emoción, reflexión y el talento de la nueva generación de actores del país.

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Mañana domingo 17 de noviembre por las pantallas del canal GEN a las 22:00 se podrá disfrutar el imperdible estreno de “Divorciadísima”, espectáculo de humor unipersonal de la consagrada actriz compatriota Lali González.

Se trata de un show con herramientas de humor moderno y recursos audiovisuales, que combina la ficción con situaciones cotidianas que supo conectar con el público local y que en su temporada 2024 en la ciudad de Asunción en un mes de cartelera agotó más de 8.000 entradas.

En esta propuesta de la actriz, directora y guionista paraguaya, que se podrá disfrutar mañana por GEN/Nación Media, cuenta su separación, las secuelas que deja un divorcio, además, incluye las dificultades que se presentan en las nuevas citas llegando casi a los 40 años y el cambio generacional de las relaciones.

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La icónica actriz se encuentra actualmente en Buenos Aires, Argentina, trabajando sobre su próximo proyecto, una obra de teatro que aterrizará en la temporada veraniega en la tradicional ciudad de verano Villa Carlos Paz, Córdoba.

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Los alumnos de la carrera de actuación Sigma, del primer año del TIA (Taller Integral de Actuación), presentan este viernes la obra “El precio de una promesa”, basada en la obra de Alfredo Días Gómez, el viernes 15 y sábado 16 de noviembre, a las 20.00, en el Arlequín Teatro, ubicado en Antequera 1061 entre República de Colombia y Teniente Fariña, en Asunción, con entradas generales a G. 50.000.

Los elencos de distintos años de la escuela de actuación dirigida por los cineastas Juan Carlos Maneglia y Tana Schémbori presentaron títulos como “La espera desespera”, “Yerma” y “Pedro Páramo”, y ahora abordan la obra del dramaturgo y autor de telenovelas brasileño Alfredo de Freitas Dias Gomes (1922-1999), que despliega el color y la cultura de Salvador Bahía con magia y alegría. Esta puesta cuenta con la dirección de José Giménez, y la asistencia de Ana Jara y Enrique González.

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En una comunidad marcada por la devoción y la superstición, Zé, un hombre humilde, ha hecho una promesa sagrada en un momento de desesperación para salvar la vida de su mejor amigo, gravemente herido. Su esperanza de cumplirla lo lleva a una travesía peculiar, cargando una cruz y un deseo sincero. Lo que Zé no imagina es que su acto de fe lo pondrá en un enfrentamiento inesperado con las autoridades religiosas, cuestionando la naturaleza de sus creencias y desatando conflictos en el corazón del pueblo.

“Una historia de tenacidad y fe que invita al espectador a reflexionar sobre los límites de la religión y el poder, y cómo un hombre, al resistir, puede desafiar a toda una comunidad. Con una intensidad que va creciendo, esta obra nos plantea preguntas profundas sobre los compromisos, la espiritualidad y el precio de nuestras promesas”, anticipó el Taller Integral de Actuación en una publicación de redes sociales.

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Las últimas funciones de la obra de teatro “El niño que se comió la servilleta de su sándwich”, del dramaturgo mexicano Ricardo Rodríguez, serán el sábado 16 y domingo 17 de noviembre, a las 17:00, en Sala La Correa (Luis Alberto Garcete 1163 casi Don Bosco, Asunción). Las entradas anticipadas tienen un costo de G. 50.000 y de G. 60.000 en puerta, y pueden adquirirse llamando al 0991 779 163.

Con una mirada honesta y fresca sobre los desafíos de la niñez, se estrenó en Paraguay este texto de origen mexicano, bajo la dirección de Ronald von Knobloch, con actuaciones de Ronald Maluf, Dai Acosta, Edu García y Andrea Rodríguez. A través de las aventuras de Rodrigo, un niño que lucha por encontrar su lugar en su nueva escuela, la obra aborda temas como el miedo, la imaginación y la resiliencia.

Rodrigo es nuevo en el colegio y enfrenta el reto de las tareas, los exámenes y encajar con sus compañeros. Su única amiga es Lili, mientras que Flor y Anselmo, o como él lo llama, el temido Dr. No, no lo dejan en paz. Un día, decidido a faltar a clases, se come la servilleta de su sándwich. Lo que empieza como una simple travesura se convierte en una aventura imaginaria que le dará fuerzas para enfrentar sus problemas.

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“El planteamiento inicial es sugerir que la resolución a los problemas se puede hacer a través del ensayo-error. Esa sugerencia está planteada en la obra como un sueño en donde se pueden imaginar posibles soluciones para luego intentar echarlas a andar”, comentó el dramaturgo Ricardo Rodríguez sobre su obra, ideal tanto para audiencias jóvenes, que se verán reflejadas en las situaciones cotidianas y desafíos del protagonista, como para adultos, quienes revivirán esos pequeños grandes dilemas de la infancia.

Los cuatro actores van interpretando e intercambiando roles, en una obra que apuesta por una narraturgia dinámica y creativa, donde el minimalismo escénico es clave para construir junto al público un escenario imaginario sin perder contacto con la realidad que Rodrigo enfrenta. La obra cuenta con el apoyo del Fondo Nacional de la Cultura y las Artes (Fondec). La producción corresponde a Marta De Barros; la asistencia de producción de Rocío Ortiz y la prensa a cargo de Elenita Aquino.

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