Miles de personas se manifestaron este sábado en Barcelona ante la convocatoria de asociaciones y colectivos de inquilinos para denunciar el difícil acceso a la vivienda y exigir una bajada generalizada de los alquileres en la segunda ciudad de España. La protesta reunió a unas 22.000 personas.

Los manifestantes, apoyados por varios partidos de izquierda y por los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO) y UGT, se reunieron por la tarde en el centro de Barcelona detrás de una enorme pancarta que reclamaba “una vivienda digna para todos”.

“Hoy es un punto de inflexión y comienza un nuevo ciclo político en lo referente a la vivienda”, declaró a la prensa Carme Arcarazo, portavoz del Sindicato de Inquilinos de Cataluña (Sindicat de Llogateres), la principal organización convocante de la protesta.

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“No puede ser que los inversores lleguen a nuestras ciudades y jueguen con los pisos como en el Monopoly”, agregó. “Hemos venido hoy a decir que se acabó”, sobre todo a los “arrendadores” que “nos roban la mitad del sueldo”.

Los manifestantes reclaman una bajada del 50 % de los alquileres, la introducción de contratos de alquiler indefinidos y la prohibición de la venta especulativa de viviendas. De lo contrario, amenazan con una “huelga de alquileres”.

Esta manifestación se hace eco de la celebrada el 13 de octubre en Madrid, que reunió al menos a 22.000 personas con exigencias similares, en un contexto de gran tensión en todas las grandes ciudades españolas por la subida de los alquileres.

Según el portal inmobiliario Idealista, el precio del metro cuadrado de alquiler en España aumentó un 82 % en los últimos diez años, un ritmo cinco veces mayor al del salario medio, que subió un 17 %, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).

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Esta situación llevó al ejecutivo a aprobar a principios de 2023 una ley sobre vivienda, que preveía un alza de las construcciones de viviendas sociales, la limitación de los alquileres en zonas tensionadas y recargos para los propietarios que mantuvieran viviendas desocupadas.

Pero la nueva legislación no ha logrado limitar por ahora el alza de los alquileres, especialmente en las grandes ciudades. El gobierno mantiene un pulso con varias regiones -que son las encargadas principalmente de su implementación- para que la apliquen, 18 meses después de su aprobación.

Fuente: AFP

• POR PALOMA STRUBING (*)
• Diseñadora especializada en gestión de proyectos. Dirección ejecutiva de la Federación Juntos por la inclusión.

Participar del wor­kshop Cataliza, en Barcelona, España, me permitió ver con más claridad lo universal de las experiencias de las personas con discapacidad o alguna condición y sus familias. A pesar de los kilómetros que nos separan, las historias de exclusión y lucha por la inclusión son sorprenden­temente similares.

El formato del encuentro propició el intercambio, la reflexión y la revisión de actitudes, situaciones y perspectivas no solo del entorno sino también pro­pias. En este contexto una preocupación se puso de manifiesto por represen­tantes de distintos lugares: la atomización, muchos gru­pos sectorizados trabajando aisladamente. Esto llevó a que me pregunte, ¿Qué es lo que nos lleva a segmentar y a agruparnos por “iguales”?

Nuestro cerebro está dise­ñado para reconocer patro­nes y clasificar informa­ción, lo que puede ser útil en muchos contextos pero que también genera que aquello que se sale de esa clasifica­ción preconcebida nos deses­tabilice, y nos enfrentemos a nuestro propio miedo a ser excluidos. Porque, ¿quién no se sintió alguna vez dife­rente al resto? Se trata de una experiencia universal, todos pasamos alguna vez por la experiencia de no per­tenecer a un grupo o espacio. Por lo que para entender esa sensación no hace falta estar relacionado con alguna per­sona con discapacidad o con­dición, basta con indagar un poco en nuestra propia his­toria. Recordando lo que nos hizo sentir ese momento, podemos empezar a enten­der la importancia de crear un entorno accesible y equitativo para todos ¿A quién no le gustaría evitarse o evi­tarle a otra persona el sen­tirse excluido?

Si diferenciar y clasificar forma parte del funciona­miento de nuestro cerebro, ¿cómo hacemos para hac­kear esa función?

La búsqueda de la respuesta empieza replicando alrede­dor del globo lo que se dio en Barcelona. Generando espacios de encuentro, de vulnerabilidad y apertura para mover las estructu­ras internas y externas con ganas sinceras de generar un cambio, buscando seguir ampliando y reforzando las redes que alivianan el peso de los miedos y potencian el esfuerzo colectivo para hacer sentir parte a todos, independientemente de lo que nos diferencia.

El padre de la joven estrella futbolística española Lamine Yamal fue apuñalado este miércoles en la localidad catalana de Mataró y su estado es grave pero estable, informó el diario español La Vanguardia.

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Mounir Nasraoui recibió varias cuchilladas en un aparcamiento de esa localidad situada unos 30 km al norte de Barcelona, tras discutir en la calle con unos hombres que le increparon cuando paseaba a su perro y que un rato más tarde volvieron a buscarle para atacarle, explicó el diario barcelonés, citando “fuentes oficiales al corriente del suceso”.

Según aseguraron a La Vanguardia fuentes del entorno de la víctima, el pronóstico de Nasraoui es grave, pero permanece “estable”.

La policía regional catalana, a cargo de la investigación, no confirmó públicamente los hechos ni respondió a las solicitudes de información de AFP.

Ya se han practicado las primeras detenciones, según el diario. La agresión tuvo lugar en el barrio de Rocafonda, donde creció Yamal y donde viven aún su padre y su abuela.

El jugador tiene por costumbre celebrara los goles haciendo con sus manos el 304, el código postal de este modesto barrio catalán.

A sus 17 años, Yamal ha protagonizado uno de los saltos futbolísticos al estrellato más veloces que se recuerdan.

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Con 15 años, debutó en el FC Barcelona y este verano (boreal) fue pieza clave de la victoria de la selección española en la Eurocopa.

Fuente: AFP

Los influencers Lata Pararã y Diego Vera se encuentran de turistas por España. Este lunes último, las celebridades de internet visitaron las instalaciones del Camp Nou, del club Barcelona, y aprovecharon para ser público en un partido del equipo azulgrana. El encuentro fue contra AS Mónaco y el Barça perdió 3 a 0; resultado que se atribuyó a la “yeta” de Lata y Diego.

El dúo conocido por los internautas como “los yeta” o “los mala suerte” fue señalado en línea por el resultado del equipo español. Lata Pararã y Diego Vera explicaron en sus redes que el estadio Camp Nou se encontraba en remodelación, por lo que no pudieron ingresar, que visitaron sus otras instalaciones como el museo o la tienda oficial de prendas deportivas.

El partido del Barcelona versus AS Mónaco se disputó en el Estadio Olímpico de Montjuic. Los paraguayos fueron público del encuentro deportivo desde un área V.I.P. (área exclusiva). Los influencers compartieron esta experiencia en sus redes y en los comentarios se destiló el enojo de los fanáticos del Barça.

“La dupla yeta haciendo de la suya”, “El Barcelona pierde después de 12 años el Trofeo Joan Gamper y por goleada”, “Con razón perdió el Barça”, “No pueden ser más yeta ustedes dos”, “Se fueron a cortar 12 años de racha nde”, “Que jeta son estos”, “Avisen cuando vayan a otro partido para apostar en contra”, escribieron.

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Para los influencers paraguayos, visitar el Camp Nou fue un sueño cumplido. “Esto es un sueño, todavía no creo, ni en Paraguay no invitan a los partidos”, dijo Diego Vera vía historias de Instagram. “No sé todavía como explicar todo esto que siento, acá es el Camp Nou, una locura es, todavía no dimensiono”, agregó Lata.

En historias de Instagram, Lata compartió un mensaje que publicó en sus redes en octubre del 2013. “Colocar un pie en el estadio del Barça es un sueño, Camp Nou, algún día pisaré ese estadio”, reza su antigua declaración. El influencer oriundo de Pedro Juan Caballero incluso se mostró llorando en las instalaciones del museo del club azulgrana.

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