- Por Rolando Vargas
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El líder del torneo Apertura tuvo que exigirse al máximo, inclusive, solo se quedó con el triunfo por la contundencia ante un Luqueño que planteó un partido intenso, con jugadores rápidos y abriendo la cancha para aprovechar los espacios, pero careció de eficacia en ofensiva.
En el primer acto del espectáculo se vio un juego con mucha presión y velocidad de los hombres en ofensiva de ambos clubes, que generaron muchas acciones de conquistas.
El local muy pronto acusó el golpe, cuando al minuto 2, Héctor Villalba ganó con su pique a Aguilar y definió con clase para el primer festejo. A partir de ahí se vio un duelo de ida y vuelta, en donde Cardozo tuvo la chance de aumentar, en tanto que el Auriazul dominó en la última parte, pero no pudo igualar por la falta de buena definición de Báez, Fretes, Pérez, Rojas y las excelentes intervenciones del portero Silva.
Tras el descanso, nuevamente el local buscó con todas sus armas romper la defensa liberteña con Diego Fernández incisivo, pero siempre faltó la precisión para descontar. Daniel Garnero sufrió desde el costado de la cancha por la presión auriazul. Recién sobre el minuto 80 respiró relajado con el tanto del recién ingresado Iván Ramírez, quien aprovechó muy bien la gran acción individual de Fernández, quien reemplazó a Enso González.
Así, el puntero sigue consolidado arriba, en tanto que Luqueño sufre otra derrota y el repudio del público anoche se hizo sentir desde las gradas.