Luqueño demostró que en el fútbol nada está dicho hasta el final. Gracias a eso, rescató un valioso empate ante Guaireña, en un meritorio segundo tiempo, en el que remontó un 2-0.
El partido tuvo dos tiempos bien marcados. En el primero, el equipo de Luciano Theiler se mostró más punzante en ataque y llegó al tanto apertura a través de Ever Cáceres, que rescató un despeje de la defensa luqueña, para meter el zurdazo que venció a Gonzalo Falcón.
El auriazul reaccionó casi al instante y un cabezazo de Rodi Ferreira encontró la buena respuesta de Finochietto. Minutos después, Lucas Barrios estuvo apunto de emparejar, pero su remate cruzado de zurda, se fue apenas desviado.
Pero el que nos los hace, los recibe. Y Guaireña volvió a facturar con un gran gol. Parzajuk habilitó por el medio a Juan Aguilar, quien metió un pase de primera a Comas. Este, sin dudar, empalmó de volea para el segundo grito local en el Parque del Guairá. Luqueño necesitaba un golpe de timón en el complemento y con el ingreso de Chapentier, Cáceres dio en la tecla.
El VAR divisó un penal de Castellano sobre el delantero y Lucas Barrios puso el descuento. Con más cambios, el auriazul apuró sobre el final y tuvo el premio a su insistencia. Joel Jiménez metió un centro que Charpentier conectó de cabeza para lograr el empate del desahogo. Para Guaireña fue un castigo mayor por su falta de aplomo a la hora de mantener el resultado.
Una despedida con pocos honores fue la que tuvo el histórico capitán de Sportivo Luqueño, Pablo Aguilar, que ayer jugó su último partido en el club. Foto: Archivo
Una despedida con pocos honores fue la que tuvo el histórico capitán de Sportivo Luqueño, Pablo Aguilar, que ayer jugó su último partido en el club.
El propio defensor, campeón con el club en el 2007, había anunciado su posibilidad de retiro fechas atrás y ahora se consumó. Y lo quiso despedir con victoria ante Sportivo Ameliano en el cierre del torneo Apertura, pero no se le dio.
Su equipo lo intentó en varios pasajes, tuvo ocasiones y hasta un penal a favor, pero que Walter González lo desperdició en el segundo tiempo. Al final, el 0-0 fue el resultado más justo, porque Ameliano también tuvo sus chances.
En el Clausura, Luqueño tendrá que hacer mejor las cosas para no sufrir en el promedio por el descenso.
Sportivo Luqueño también cerró su participación en la fase de grupos de la Copa Sudamericana de la que ya se había eliminado hace varias fechas.
Enfrentó de visitante a Gremio de Brasil, ante el que cayó por 1-0, con el tanto convertido por Riquelme Freitas dos Santos, en el minuto 75.
El cuadro auriazul controló bastante bien al cuadro gaucho, que si bien se hizo dueño del trámite, no pudo quebrar a la defensa auriazul en el primer tiempo.
Incluso el arquero Mongelós le tapó un penal a Arezo en el minuto 14. Sin embargo, la expulsión de Elvio Vera cerca del final del primer tiempo complicó sus posibilidades y la exigencia fue mayor en defensa.
Tras el aguante en el segundo tiempo, se produjo el tanto de Freitas, que echó por tierra todo el esfuerzo del equipo auriazul. Sobre el final, Fernando Benítez también vio la roja, dejando con nueve a su equipo.
Luqueño se despide del torneo sin haber ganado ni un solo partido. Una participación para el olvido.
En Luqueño y más allá del partido por cumplimiento que jugará hoy ante Gremio para cerrar su participación en Copa Sudamerica, se ventiló lo que sería un nuevo acto de indisciplina con su jugador Rodi Ferreira.
El ex-Olimpia y Guaraní quedó afuera de la lista de Julio César Cáceres y ni siquiera viajó con la delegación a Porto Alegre, pese a estar inicialmente en la lista.
De acuerdo a los datos que se dieron a conocer, Ferreira habría faltado a un entrenamiento sin previo aviso, como ya ocurrió en una ocasión anterior, por lo que fue interpelado por el capitán Pablo Aguilar. Tras esto, fue sacado de la lista de viajeros.
“Tenemos varios antecedentes de indisciplina de él. Si habrá sanción o no, en este caso dependerá del técnico. No es bueno tener en el grupo a un muchacho así”, señaló el dirigente Enrique Gill a la 650 AM.
Otras fuentes aseguran que a la vuelta del plantel se le rescindiría su contrato con el club.
Dos juegos que ya no adquieren relevancia, más allá de jugarse el prestigio y la posibilidad de buscar una victoria e ingresar un dinero a las arcas de ambos clubes, son los que tendrán Olimpia y Sportivo Luqueño en sus despedidas de los torneos continentales. Uno en Copa Libertadores y otro en Copa Sudamericana.
El Franjeado recibe a San Antonio Bulo Bulo en lo que será el cierre de su penosa participación en la fase de grupos de la Libertadores, del que ya está eliminado, sin sumar victorias (3 derrotas y 2 empates).
El Franjeado se juega su prestigio y la única motivación de ingresar el monto por mérito deportivo de 330 mil dólares, en caso de ganar, y que le vendría muy bien, considerando que ya no tendrá competencia internacional en el segundo semestre.
En tanto, Luqueño también jugará por mero cumplimiento y de visitante ante Gremio de Porto Alegre en su grupo de la Copa Sudamericana.
El cuadro auriazul, que ahora está bajo el comando de Julio César Cáceres, tampoco pudo festejar victorias en sus anteriores cinco partidos (2 empates y 3 derrotas).