La disputa de la fecha 16 pone nuevamente en el panorama a Libertad. El único y cómodo puntero del torneo Clausura se traslada esta vez a Mallorquín para enfrentar a General Caba­llero que, tras estar a punto de tumbar a Cerro Porteño, cayó de visitante ante Luqueño la fecha pasada y también nece­sita sumar para no volver a la zona quemante y en el lote de los comprometidos con el des­censo.

Demás está hablar del gran momento gumarelo que, salvo aquel freno que tuvo ante Guaraní, acumula seis victorias consecutivas y mos­trando un nivel y superioridad superlativos sobre sus riva­les, como ocurrió en el último partido ante Ameliano, al que goleó a ritmo de práctica.

Además y pese a mechar habi­tualmente algunos jugadores gracias al gran plantel del que dispone, el juego del equipo no se resiente, lo que le da un plus extra para encarar con solven­cia sus partidos.

El cambio de timón en el cuerpo técnico no afectó en absoluto en su rendimiento y por el contrario, siguió mos­trando un juego implacable y de mucha contundencia para sortear rivales. De ganar, estará acercándose mucho más al objetivo del bicam­peonato, que parece tenerlo al caer, por la diferencia de nueve puntos que lo separa de su escolta Cerro Porteño, que seguramente estará expec­tante de este duelo.

Más tarde, en Villa Elisa, Ameliano tendrá que bus­car la forma de salir del mal momento en el campeonato tras sus tres últimas derro­tas, en su enfrentamiento ante Tacuary. El equipo de Humberto García se acerca peligrosamente a la zona más quemante del promedio por lo que deberá buscar retomar sí o sí el camino de las victorias para evitar la debacle. Además, tendrá como rival al más nece­sitado de todos. El cuadro de barrio Jara está último en este lote y tampoco tiene margen de error para evitar despedirse tempranamente de Primera División. Serán puntos de oro para ambos.