Cerro Porteño alcanzó anoche la punta en solitario del torneo Clausura tras superar a Nacional 2-1, a falta de los partidos que deberán disputar mañana 2 de Mayo y Olimpia.
El partido fue a pedir de boca del Ciclón en el primer tiempo. Monopolizó el juego por los costados y fue implacable en el mediocampo para llegar con muchos jugadores en función de ataque. De ahí que rápidamente comenzó a penetrar la última zona defensiva de Nacional. En una incursión del chico Diego León se generó el primer tanto. Tras un remate de este, el rebote lo volvió a tomar para abrir la jugada hacia Derlis Rodríguez. El centro al medio de este fue controlado perfectamente por Francisco Da Costa, que en un movimiento y giro dejó sin chances a Claudio Núñez para meter el gran remate de zurda, que venció la resistencia del Kili Rojas. Golazo.
En los minutos siguientes, llegaron los mejores momentos del Ciclón, rotando la pelota, anticipándose en todo a un equipo de Nacional que no tuvo ni siquiera conexión del mediocampo para arriba.
De ahí que no fue extraño que llegara el segundo tanto antes del cierre de esa etapa, luego de otra gran jugada colectiva. Wilder Viera abrió cancha para Pachi Cardozo que, metido como punta y luego de dejar atrás a su marcador, tiró el centro de la muerte para el cabezazo en solitario de Diego Churín, que minutos antes había ingresado por el lesionado Da Costa.
Los minutos iniciales del complemento continuaron con el predominio azulgrana, pero Nacional tuvo una “ayuda” impensada de Brock. El brasileño utilizó su brazo para despejar un balón y el VAR lo advirtió. El árbitro Blas Romero concedió el penal. Gaona Lugo no perdonó, puso el 2-1 y el partido entró en un clima de incertidumbre.
Los cambios en ambos equipos le dieron otra fisonomía al partido, porque Cerro ya no tuvo la fluidez en su fútbol y a Nacional le faltó mejores recursos para buscar la paridad. Al final, un triunfo merecido del Ciclón, que mira a todos desde arriba.