En Cerro Porteño siguen los enojos hacia Juan José Zapag, su presidente. Muchos hinchas, socios e incluso exjugadores se mostraron partidarios de su salida del máximo cargo del club, tras la debacle en el superclásico, que lo dejó al Ciclón prácticamente fuera de la lucha por el título del Clausura.
Sin embargo, para el abogado del titular azulgrana, Diego Tuma, Cerro Porteño no podría manejarse como club sin su actual presidente, por aquello de ser el único que es capaz de sostenerlo financieramente, ya que tiene cuantiosas deudas con bancos de plaza.
“Hoy Cerro Porteño no puede manejarse sin Juan José Zapag, y no existe ningún candidato ahora mismo en Paraguay que pueda hacer mejor las cosas que él”, afirmó Tuma a las 800 AM.
Indicó que la principal traba tiene que ver con las deudas que el club tiene con los bancos, más allá de otras que el club tiene (20 millones de dólares) con el propio Zapag. “Cerro perdería todo tipo de contacto con los bancos, porque él (Zapag) es la garantía”, remarcó.
Sin embargo, para Julio Ullón, excandidato en su momento a la presidencia y crítico de la gestión de Zapag, refirió que “existen instrumentos para financiar cualquier tipo de emprendimiento privado o societario de una organización sin fines de lucro como Cerro Porteño. Esto no pasa por los recursos económicos, porque Cerro tiene ingresos de 20 millones de dólares anuales, sino por la pésima y mala administración”, disparó.
De todas formas, todo parece indicar que un cambio de timón no parece estar en la agenda azulgrana, al menos por ahora.
Intenso pero improductivos. Buen trato de la pelota pero sin golpear arriba. Así fue el trámite de un partido que pintaba para más, entre Sportivo Luqueño y Deportivo Recoleta, que igualaron sin goles en Itauguá.
Mirando el marcador, perjudicó a ambos. Al Auriazul porque cortó su racha de dos victorias seguidas y de perder una magnífica oportunidad de acercarse mejor al puntero Cerro Porteño. En tanto, para el cuadro funebrero, ganar ya era una necesidad, pero ahora suma seis partidos sin hacerlo, tres de ellos con derrotas, y con panorama inquietante en su promedio.
No fue un mal partido ni mucho menos pero los intentos ofensivos de ambos equipos chocaron con sus muy buenas coberturas defensivas. Además, las veces que los arqueros tuvieron que intervenir lo hicieron muy bien. Fue Recoleta el que tuvo la primera clara del partido en una acción en la que Hugo Sandoval se quedó “sin piernas” para definir ante Aguilar.
Luqueño, bajo la batuta de Sebastián Quintana, también inquietó pero recién en el segundo tiempo Sergio Díaz tuvo la gran chance de poner al frente a Luqueño, pero su remate salió desviado. Ya después hubo intentos, pero todo quedó ahí.
Los dos grandes de nuestro fútbol, Olimpia y Cerro Porteño, entrarán en acción esta tarde en la continuidad de la fecha 9 del torneo Clausura. Ambos con realidades distintas.
El Franjeado, muy relegado en la tabla, tiene la imperiosa necesidad de sumar una victoria, algo que no ocurre desde la fecha 5, pero a la vez, de mejorar su juego, que es lo más cuestionado al equipo que dirige Ramón Díaz.
El técnico argentino podría introducir nuevamente cambios en su equipo, en la búsqueda de esa mejora. Pero tendrá enfrente a un rival también necesitado, por su complicada situación en el promedio y que de local de seguro intentará dar el golpe ante su encumbrado rival. Sin dudas, será otra prueba de fuego para Ramón Díaz, cuyo trabajo está siendo muy cuestionado por parte de la hinchada franjeada.
VA POR MÁS
El que desde hoy centrará toda su atención en el torneo local es Cerro Porteño, único puntero del Clausura. El Ciclón ya no tiene competencia internacional tras quedar fuera de la Copa Libertadores a mitad de semana y con ello buscará sumar otros tres puntos ante Sportivo Trinidense para seguir manteniendo la diferencia en la tabla.
El cuadro de José Arrúa, que también cumple un papel destacado en este torneo, también buscará, no obstante, recuperarse de la derrota sufrida ante Nacional la fecha anterior.
La resaca tras el gran triunfo en el superclásico y principalmente los cambios que introdujo el técnico Diego Martínez, no le vinieron bien a Cerro Porteño, que no pudo con Nacional en su Nueva Olla, frenando su racha de victorias.
El empate sin goles refleja un poco lo que fue el compromiso, sobre todo en el primer tiempo, donde predominaron la marca, las fricciones y la falta de ideas a la hora de buscar el arco por parte de ambos equipos.
De todas formas, el mérito mayor se lo lleva la Academia, que en ningún momento se vio superado por el Ciclón y por el contrario, las veces que atacó lo hizo de forma punzante y hasta tuvo las mejores ocasiones para lograr el tanto del desequilibrio, ya en el segundo tiempo.
El equipo de Sarabia mantuvo una disciplina táctica impecable en todo el partido, con todos los jugadores asumiendo el rol de marcadores las veces que fue necesario y con relevos efectivos para evitar ser sorprendidos por los pases filtrados.
Ya al comienzo del segundo tiempo, el técnico Diego Martínez intentó enderezar el patrón de juego de su equipo con los ingresos de Iturbe y Cecilio Domínguez, pero fue más de lo mismo.
Nacional encontró más espacios para contragolpear y un remate desde lejos de Hugo Adrián Benítez casi termina en gol, pero Arias apagó el incendio. La posesión la tuvo mayormente Cerro, que ya con Aliseda en cancha apuró para llegar al arco de Santiago Rojas con más opciones, pero jamás dispuso de una ocasión clara. Los intentos de Cecilio e Iturbe quedaron ahí. Por el contrario, fue Nacional el que casi lo sentencia nuevamente con Carlos Arrúa solito para definir, pero no hizo otra cosa que regalarle la pelota a Arias.
El empate se ajusta a lo que se vio del partido, pero ninguno de los dos salió conforme.
La gran fiesta del superclásico de nuestro fútbol entre Olimpia y Cerro Porteño se traslada al Este del país. El estadio Antonio Aranda será testigo esta tarde de otra nueva edición del estelar duelo de los dos grandes de nuestro fútbol.
El Franjeado, que oficiará de local, busca levantar vuelo, algo que no pudo lograr aún si siquiera con el cambio de timón. Los jugadores que llegaron como refuerzos respondieron a medias y el mejor de ellos, Sebastián Ferreira, se lesionó un par de fechas atrás, lo que evidentemente mermó el potencial ofensivo del equipo.
Ramón Díaz, su técnico, recupera a algunos lesionados y la convocatoria del arquero Gastón Olveira obliga a pensar que el uruguayo podría arrancar de titular en este partido tras dejar atrás su dolencia.
El gran ausente en la nómina de convocados es Derlis González, que quedó fuera por decisión técnica.
Cerro, por su parte, tiene clara la película. Mantener la punta de la tabla es prioridad y, además, tiene la espina clavada de no ganar un duelo clásico desde hace tres años.
Ahora parece estar en un estado de forma ideal para lograrlo y, además, mantendrá la base del equipo que le ganó la fecha pasada al 2 de Mayo.