El compositor y productor presenta “Buena suerte”, su nuevo tema promocional que produjo junto con Luigi Manzoni. En esta charla con La Nación/Nación Media, el artista habla de su experiencia en el proceso creativo, cuyo resultado es producto de un diálogo con otras creaciones de artistas que lo antecedieron y otros con los cuales coexiste en la actualidad.

• Por Jimmi Peralta
• Fotos: Gentileza

Área 69, Los Chamos del Momento, Los Verduleros y Bri­tRanchera son algunos de los proyectos musicales que marcaron la hoja de ruta de Mauri Rodas, compositor y productor de la escena local que se encuentra promocio­nando actualmente su nuevo sencillo “Buena suerte”, en el marco de su proyecto solista Mauricio y las Cigarras con el sello de Inout Music Prod.

Mauri comprende su per­fil artístico y sonoro desde los momentos particula­res que vive en la música y en su vida misma. Ahora se encuentra buceando entre aquel sonido que marcó en sus primeros pasos y el con­texto de la música actual, descubriendo sus propias posibilidades creativas y promocionando su último trabajo. En esta entrevista habla sobre su presente, su propuesta y sus planes.

–Yo hago música escuchando música. Las ideas para can­ciones me vienen de otras canciones, y ahí me dispara algo y me siento a la compu­tadora. En el caso puntual de “Buena suerte”, es una mezcla de varias canciones de otros autores internacio­nales, de escuchar mucha música y de ideas que tenía guardadas acá en el teléfono, el riff de la guitarra o algunas anotaciones que tenía por ahí también. Ese es más o menos mi proceso, un poco desor­denado, pero suelo llegar al objetivo.

–Empecé a juntar un poco las ideas que tenía y armar una tarde de domingo, pri­mero toda la parte musical y melódica de la canción, y después la maqueta, sin letra, tarareando. Y ahí me quedé semanas con esa idea, buscando qué escribirle, ver de qué quería hablar, qué era el momento de decir. En ese momento yo estaba pasando por una situación un poco compleja en una relación amorosa. Sentía que estaba llegando ya a su final inmi­nente y yo quería cambiar ese switch de terminar la relación mala onda, que esté todo bien. O sea, “poder decir adiós es crecer”, dijo Gustavo Cerati. Entonces “Buena suerte” sería más o menos como decir “Gra­cias, gracias por todo, que te vaya superbién, nos vemos”. Una cosa así. Esa idea quedó y entonces empecé a escri­bir y a buscar en mis blogs de notas frases, citas, ano­taciones.

–Últimamente, en las últi­mas canciones que vine sacando y produciendo en general, me llega un momento en el que parece que me tranco, que ya no tengo por dónde avanzar y me planteo que es hora de que otra persona ponga o deje su impronta a esto. Y bueno, con Roberto “Chi­rola” Ruiz Díaz venimos tra­bajando hace muchísimos años, muchas canciones, tanto mías en su mayoría, y algunas que otras de Kchi­porros también en la parte lírica. Me encanta cómo escribe él. Y creo que cuando unimos nuestras palabras, nuestros versos, nuestras ideas, conviven así de una forma que a mí me encanta. Yo le paso una maqueta por Whatsapp, él siempre se copa y me da una respuesta con su parte al toque, máximo un día después. Me gusta ese ejercicio de hacer las cancio­nes así con él.

–No, en “Buena suerte” se sumó un nuevo personaje, una nueva figura, Ricardo García, más conocido como Mostrico. Un joven venezo­lano que está por acá cur­tiendo y haciendo mucho ruido, haciendo temblar la movida del trap, del hip hop, del rap en Asunción. Nos conocimos por casua­lidad. Empecé a escuchar unas cosas de él, me insis­tió, así que quería escribir algo. Le tiré la idea y me res­pondió al toque otra vez, ya me cantó y ahí quedó otra parte del verso. Entonces, al final terminamos de com­poner la canción entre los tres, en distintos momentos y sin vernos prácticamente, solamente por Whatsapp. Eso es un punto a favor para la tecnología y todas esas cosas.

–La producción de esta can­ción estuvo a cargo de Luigi Manzoni, también otro gran pero gran talento y descu­brimiento para mí, porque si bien lo conocía como músico, como productor no. La diná­mica de trabajo con él fue, ya cuando tenía la maqueta lista, hablé con él. O sea, justo estaba viendo unos trabajos que hizo con otras bandas que me llamaron la atención. Ahí le escribí, le envié la canción, le gustó y ya la primera vez que fui al estudio él ya armó casi todo el tema. También tiene mucho talento, toca varios instrumentos. Me encanta saber esa actividad que él tiene y esa rapidez. La pri­mera vez que yo fui ya tenía casi todo el tema. Casi todo lo que estamos escuchando ahora ya estaba ahí puesto. Y me gustó de una. Si no me gusta de una, prefiero ir a otra cosa.

–Con estos trabajos tengo la intención de volver un poco a las canciones de antes, a las influencias de antes, obvia­mente sí o sí sazonado con algo más actual. En los mate­riales que estuve trabajando en el último tiempo fueron grandes producciones, que llevaban muchos músicos, mucho tiempo de estudio, de grabación, de composi­ción, de idas y vueltas, de puedo, no puedo, de insegu­ridades, de millones de cosas que son parte de una produc­ción grande y compleja. Des­pués de haber pasado todo ese bagaje, ahora me siento en un momento de hacer una canción con una onda mini­malista, con un tiempo más lento.

–De la música contemporá­nea me atrapa, mejor dicho, me llaman mucho la atención artistas del género urbano y del trap como Bad Bunny, Rosalía, vamos incluirle a C. Tangana, que son proyectos actuales y más en habla his­pana. Me sorprende mucho cómo utilizan palabras que todo el mundo utilizó y algu­nas inclusive son bastante cursis o muy repetitivas, pero la forma de cómo lo dicen o cómo lo hacen que­dar dentro de las líneas de un párrafo de una canción le da un toque. Con las mis­mas palabras que todos usa­mos siempre, ellos te dicen eso, pero de otra forma, y no solamente en la ubicación dentro de un género litera­rio, sino también cómo lo dicen vocalmente, la expre­sión que utilizan, la forma, el tono de la voz. Y entre mis influencias más clásicas, a mí gustan muchísimo Los Beat­les, de siempre. Estoy engan­chado con la última canción que lanzaron y que me voló la cabeza, todo ese proceso también. También me gus­tan mucho The Doors, Nir­vana, Bronco, Jorge Drexler, Café Tacuba, Los Tres, IKV, Gustavo Cerati, por favor, es una influencia importantí­sima en todo sentido.

–La escena de la actualidad yo creo que está en un pro­ceso de cambio y de mucha curiosidad y de muchísimo movimiento. Los músicos están trabajando, se están haciendo las cosas, hay mayor exposición. Tene­mos el caso acá de nuestros colegas y amigos de Tierra Adentro, que estuvieron nominados a una Grammy; los Kchiporros, que van a México; El Culto Casero, que se va al Lollapalooza.

Hay un movimiento de gente que está saliendo y eso retro­alimenta mucho la escena. Las futuras generaciones de músicos están creciendo y viendo que se puede y que no hay magia, hay trabajo a full.

–Yo creo que actualmente me encuentro en un momento que es un pico importante de mi carrera. Sobre todo, en la parte creativa. Ahí me siento muy entrenado, diga­mos, estoy como a tiro y estoy haciendo cosas que me vue­lan la cabeza, artísticamente hablando. El momento actual que estoy viviendo me encanta, me gusta, me apa­siona y me da muchas ganas de seguir creando. Sé que hay más y que podemos estar en mejores momentos de todo.

–Los proyectos a corto plazo para el verano son tocar, salir a mostrarse, salir a mostrar esta nueva canción que aca­bamos de lanzar. Y bueno, en lo personal, un poquitito más a mediano plazo, seguir creando estas experiencias musicales en las que sí sue­nan canciones de Las Ciga­rras y otros proyectos en los que estoy que me gustan.