Se suspendió la audiencia preliminar para Pablo Suárez y María José Arce, acusados de haber estafado a los futbolistas Rodrigo Muñoz, Osmar Molinas y Juan Manuel Salgueiro. La diligencia judicial se tenía que realizar ante la jueza penal de Garantías, Inés Galarza, pero se pospuso debido a que existe pendiente de estudio y de resolución una acción de inconstitucionalidad presentada ante la Corte Suprema de Justicia.
La defensa de los acusados recurrió a la Sala Constitucional de la Corte tratando de que la máxima instancia judicial pueda declarar la extinción del proceso y disponer el sobreseimiento definitivo de los dos procesados.
Ahora serán los ministros de la Corte, César Diesel, Antonio Fretes y Luis María Benítez Riera quienes deberán decidir si rechazan la acción, lo que permitirá que se pueda llevar a cabo la audiencia preliminar, donde se definirá si se eleva a un juicio oral y público el presente proceso penal.
Acusación
El Ministerio Público acusó a Pablo Suárez, uruguayo, y a su esposa, María José Arce, quienes en representación de la firma SUAR SA, supuestamente, vendieron departamentos a construir en el barrio Santísima Trinidad a los futbolistas Juan Manuel Salgueiro, Rodrigo “Popi” Muñoz y Osmar Molinas.
A Muñoz le vendieron supuestamente dos departamentos del edificio Cibera Park, que SUAR SA debía construir y entregar al jugador en setiembre del 2016. El arquero uruguayo pagó la totalidad de US$ 256.760. Las escrituras del dominio tendrían que haber sido transferidas en enero del 2017, lo que no sucedió, según consta en la acusación.
Manuel Salgueiro entregó la suma de US$ 194.040 por dos departamentos del mismo edificio Cibera Park, pero que no fueron construidos, según la denuncia. Los inmuebles debían ser entregados al jugador en noviembre del 2016. Por último, Osmar Molinas, jugador paraguayo, también fue víctima de la estafa.
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A Ultranza Py: comenzó el juicio oral a Miguel Insfrán, alias “Tío Rico”, y otros 17 acusados
Se inició el juicio oral y público para Miguel Ángel Insfrán Galeano, alias “Tío Rico”, y otros 17 acusados en el caso A Ultranza Py. Las defensas intentaron suspender la realización de la audiencia oral, pero el tribunal de sentencia que preside la jueza María Luz Martínez rechazó el pedido de posponer el juicio oral y dio comienzo al mismo.
La audiencia oral se desarrolló vía telemática para los acusados, quienes están presos en diferentes penitenciarias. En el caso de Miguel Ángel Insfrán, el mismo está preso en la cárcel de máxima seguridad de Minga Guazú.
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El tribunal de sentencia que tiene a su cargo juzgar el presente caso está conformado por la jueza María Luz Martínez e integrado por Federico Rojas y Dina Marchuk, quienes fijaron la prosecución de la audiencia oral para el día unes 14 de julio a las 08:30; mientras que el fiscal del caso es Deny Yoon Pak.
Además de Miguel Insfrán, están incluidos en este proceso, por tráfico de drogas y algunas por lavado de dinero:
- el exdiputado Juan Carlos Ozorio
- Conrado Insfrán, hermano de “Tío Rico”
- Fernando Sebriano
- José Enrique Gamarra
- Alexis González Zárate
- Reina Mercedes Duarte
- Fátima Irene Koube
- María Noelia Colmán
- Alberto Koube Ayala
El Ministerio Público acusó a Tío Rico por presuntamente liderar un esquema criminal dedicado a introducir droga a Paraguay y enviarla al exterior. La Fiscalía cuenta con un arsenal de alrededor de 1.600 documentaciones, una acusación de más de 170 páginas, pericias de equipos informáticos, telefónicos y revenido químico, y unos 90 testigos en el marco de la causa.
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Sube a 78 la cifra de muertos por inundaciones en Texas
Los equipos de rescate prosiguen este domingo una búsqueda contra reloj de las decenas de desaparecidos por las inundaciones en Texas, en el sur de Estados Unidos, que hasta el momento han causado 78 muertos.
Ciudadanos se unieron a las autoridades para buscar a los desaparecidos, entre estos 10 niñas y un consejero de un grupo cristiano que acampaban a la orilla del río Guadalupe. En el campamento del condado de Kerr se podían ver el domingo mantas, osos de peluche y otras pertenencias de las niñas recubiertas de barro. La fuerza de la corriente destrozó las ventanas de las cabañas.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, indicó que en el campamento Mystic había unas 750 menores cuando se desbordó el río. Quedó “devastado de una forma que no había visto en ningún desastre natural”, declaró.
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“La altura a la que el agua corría llegó a la parte superior de las cabañas”, explicó Abbott en la red social X tras visitar la zona. “No pararemos hasta encontrar a todas las niñas”, añadió. El vicegobernador del estado, Dan Patrick, alertó que las lluvias que arreciaron el domingo causarán más inundaciones.
Y el número de fallecidos no para de crecer: “Hemos registrado 68 fallecidos en el condado de Kerry”, 40 adultos y 28 niños, declaró el sheriff de esa zona, Larry Leitha. Autoridades de Texas confirmaron además que al menos otras diez personas fallecieron en regiones cercanas.
Patrick relató que un trabajador del campamento Mystic se enfrentó a la corriente para romper una ventana de una cabaña y permitir que un grupo de niñas pudiera salir y no morir ahogadas. Para salvarse, “las niñas nadaron durante 10 o 15 minutos. ¿Se imaginan, en la oscuridad y con las aguas revueltas y los árboles pasando a su lado y las rocas cayendo encima?”, describió.
En un reporte anterior, los encargados de las tareas de búsqueda informaron que 27 niñas del campamento estaban desaparecidas, pero Dalton Rice, funcionario del municipio de Kerrville, donde está el campamento Mystic, rebajó el domingo esa cifra a 11 personas.
El presidente estadounidense, Donald Trump, firmó este domingo una declaración de catástrofe grave que permite la liberación de recursos federales para el estado de Texas. “Esta es una catástrofe no vista en 100 años y es simplemente tan horrible de ver” en Texas, que visitará “probablemente” el viernes, contó horas después Trump a periodistas.
Más lluvias
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) advirtió el domingo del riesgo de nuevos diluvios ya que se esperan lluvias torrenciales en zonas de Texas en las que el suelo está saturado.
“Es posible que caigan entre 50 y 100 milímetros adicionales de lluvia, con bolsones aislados de cerca de 250 milímetros”, indicó el servicio meteorológico. “Es muy difícil prever exactamente dónde ocurrirán las precipitaciones más fuertes”, añadió.
El viernes el río Guadalupe creció unos ocho metros en 45 minutos, debido a la caída de más de 300 milímetros de lluvia durante la noche, un tercio del promedio de precipitaciones en todo un año.
Las inundaciones repentinas no son inusuales en el sur y el centro de Texas, donde se produjo la tragedia, pues el suelo carece de las condiciones para absorber el agua de las lluvias torrenciales. La zona donde se produjo el diluvio del fin de semana se conoce como “callejón de las inundaciones repentinas”.
“El agua llegaba hasta la copa de los árboles. Unos 10 metros más o menos”, explicó Gerardo Martínez, un vecino del municipio de 61 años. “Autos y casas enteras se iban río abajo”, describió.
Científicos y agencias de gestión de catástrofes han criticado a Trump por los recortes de financiación y personal en el organismo de las previsiones y advertencias meteorológicas, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA).
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, aseguró este domingo que Trump quiere “mejorar las tecnologías” del NOAA. Los científicos alertan de que los fenómenos meteorológicos extremos cada vez son más comunes e intensos debido al cambio climático causado por el ser humano.
“Cierre a la tragedia”
Voluntarios de diferentes puntos del país viajaron al condado de Kerr, el más afectado por las inundaciones, para ayudar en las tareas de búsqueda. Adam Durda y su esposa Amber, ambos de 45 años, viajaron tres horas en auto para colaborar. Se centran en la búsqueda de cuatro mujeres que se encontraban en un casa arrasada por la corriente.
Sus familiares pidieron ayuda, “pero, por supuesto, buscamos a cualquiera”, explicó Durda a la AFP. El equipo de Justin Morales, de 36 años, encontró tres cuerpos, entre ellos el de una de las niñas del campamento Mystic atrapada en un árbol.
“Nos alegra poder darle un cierre a la tragedia de las familias”, explicó a la AFP. “Ayudar a que algunas de esas familias tengan un final. Por eso estamos aquí”.
Fuente: AFP
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Cae argentino por un caso de estafa
La Policía detuvo a un ciudadano argentino que intentaba usar tarjetas clonadas para comprar teléfonos celulares de alta gama en una tienda de Asunción. El sospechoso contaba con orden de captura internacional por defraudación mediante el uso de tarjetas de crédito y débito, en grado de tentativa, y por asociación ilícita.
Según el reporte policial de la Comisaría 10.a Metropolitana, un local que se dedica a la venta de celulares, ubicado sobre Aviadores del Chaco casi San Martín, activó el protocolo por compras sospechosas y se pudo lograr la detención de Leonardo Enrique Panes, de 38 años.
El hombre llegó hasta el comercio que se dedica a la venta de electrónicos y solicitó ver varios productos, especialmente celulares de alta gama. Esto llamó la atención del gerente, que alertó a la Policía, cuyos efectivos llegaron mientras esta persona aún estaba en el sitio. Agentes de Investigación del Cybercrimen y Hechos Punibles Informáticos solicitaron sus documentos a esta persona y corroboraron que contaba con una orden de captura internacional.
Durante el procedimiento fueron incautados del poder de detenido: dos aparatos celulares, una tarjeta de crédito y dinero en efectivo. El hombre fue trasladado a la dependencia policial para su verificación, donde se confirmó la falsedad del documento presentado ante las autoridades.
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De viejas y viejos en plenitud. Edadistas, abstenerse
- Ricardo Rivas
- Periodista
- X: @RtrivasRivas
- Fotos: Gentileza
El edadismo es una patología social que da cuenta de quienes victimizan y discriminan por edad sin observar la condición humana ni respetar la dignidad infinita de cada persona.
La semana que viene –el domingo– finalizará el Mundial de Clubes de la FIFA (Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol). Habrá terminado también esta suerte de ensayo general de otro campeonato “mundial”, el de selecciones nacionales, que durante el 2026 se desarrollará en México, Canadá y Estados Unidos.
Es preciso, entonces, para las entidades organizadoras, capacitar a quienes tendrán la responsabilidad de aportar sus conocimientos para que ese evento cuatrienal –deportivo y cultural– sea estupendo y, finalmente, un meganegocio brillante.
También es preciso capacitar a los públicos que –por qué no decirlo– tienen prácticas sociales diferentes para consumo y disfrute de ese tipo de espectáculos. No es sencillo, por cierto. El encuentro en el que se definirá el campeón se realizará en el Metlife Stadium de Nueva Jersey, a las cinco de la tarde de la hora del este.
Los múltiples ecosistemas comunicacionales –con medios tradicionales o no– también son parte de tales aprendizajes que se realizan sobre la marcha. Las narrativas –en línea con lo dicho– también serán diferentes ante tanta diversidad. Con esos objetivos obvios entre tantos otros que solo conocen unos pocos, desde el 14 de junio último –cuando el Inter de Miami y el Al-Ahly empataron sin goles en el Hard Rock Stadium de Miami Gardens– 32 formaciones constituidas con destacados deportistas disputaron y disputan sin descanso, aunque algunos, por los avatares de las competencias, ya volvieron a casa porque sus formaciones quedaron en el camino.
DATOS, METADATOS Y CURIOSIDADES
Entre los 230 futbolistas de alta competencia que se enfrentan en cada disputa, 80 de ellos tienen 22 años; 77, más de 21; 69 superan los 25 y 64 son mayores de 29. En este último grupo se encuentran Lionel Messi (38), Luis Suárez (38), Sergio Busquets (36) y Jordi Alba (36). Seguramente, ese cuarteto bien podría devenir en quinteto si añadiéramos a Cristiano Ronaldo (40), que no participa de la copa en juego, pero claramente son gigantes profesionales de altísima competencia con máxima visibilidad –entre aficionados y quienes no lo son– desde poco más de un par de décadas.
Sin embargo, no son pocas ni pocos aquellos que no dudan en llamarlos viejos y criticarlos por ello, dado que “ya no juegan como antes”. Para muestra alcanza con un botón. Apenas un año atrás, el periodista Dylan Hernandez (36), en el diario Los Angeles Times, enlazó apenas once palabras para decir de sus contemporáneos futbolistas que “Messi es viejo. Luis Suárez está viejo. Sergio Busquets está viejo”. Pese a ese parecer, su mirada crítica fue benevolente con Jordi. “El único miembro del (ex) cuarteto de Barcelona que no parecía estar jugando con el depósito de gasolina vacío fue Alba, el lateral izquierdo de 34 años que corría de un lado a otro de la banda como si fuera 10 años menor que él”.
Bordeó el edadismo, esa patología social que da cuenta de quienes victimizan y discriminan por edad sin observar la condición humana ni respetar la dignidad infinita de cada persona. “Es preciso comprender y comprehender que desde el mismísimo momento en que se abandona la vida intrauterina comienza el envejecimiento, también llamado senescencia”, decía el bien querido Helvio “Poroto” Botana, uno de mis maestros de vida que me indujo al periodismo. “Es inevitable”, advertía.
Hay quienes, pese a ello, se animan a explicar que la vejez comienza en torno de los 60 años. Eufemistas, muchas y muchos, nos dicen que somos parte de la llamada tercera edad, mientras que otros nos señalan como “adultos mayores”. En China, no son pocas las y los periodistas con los que compartimos 15 años de trabajo en la agencia de noticias Xinhua que me apodan lǎo . Veterano. Confieso que me divierte. Y, cuando los tiempos dan tiempo para la reflexión, me sorprendo y asombro de ser tan viejo como lo era don Ricardo, nuestro querido viejo. ¡Y que mis hijos me llamen amorosamente “viejo” como llamábamos a mi viejo!
ESPERANZA DE VIDA
Allá por 1951 –cuando nací, en Buenos Aires, Argentina, unos 1.250 kilómetros al sur de mi querida Asunción, un viernes 12 de enero, tal vez, cerca de las cuatro de la tarde– médicos, médicas y expertos en estadísticas explicaban que la esperanza de vida era de 65 años. Especificaban también que ese dato era “un promedio” (¿cuándo no lo es el resultado de un trabajo estadístico?) porque los estudios de entonces precisaban que las mujeres llegaban hasta los 68 y los hombres hasta los 63.
Esperanza de vida… Curiosa expresión. Aunque –ahora que lo pienso, en esta noche de viernes arropado por la silenciosa paz de la nocturnidad, muy cerca de los leños crepitantes, sentado en mi exclusiva silla mecedora– la esperanza era de ellos y ellas, productores de estadísticas. Sonreí.
Afuera, en las calles desiertas los termómetros marcan -6°. La ola polar pega con la fuerza. Veintisiete mil doscientos cuatro días pasaron desde entonces hasta este domingo. La luz encandiló mis ojos por primera vez hace ya seiscientos cincuenta y dos mil ochocientas noventa y seis horas. La curiosidad me llama.
DeepSeek –la IA (inteligencia artificial) china de código abierto– me dice que las niñas y niños que nazcan este domingo, siempre según los estudios de aquellas y aquellos que todo lo miden– en promedio vivirán 77,5 años. La vida se prolonga. “¡Ahora vivimos más y mejor!”, escuchamos una y otra vez. ¿Será tan así? No puedo con el oficio. Siempre me emergen preguntas. Nunca respuestas. Esas solo aseguran tenerlas los que se dedican a la política o a las creencias. Pensamientos y recuerdos vuelan por sobre mí. Descubro que no tienen techo.
PLENITUD
No son pocos los viejos y viejas que aparecen y desaparecen luego de entrecerrar mis ojos. Ringo Starr (84), Paul MacCartney (83), Mick Jagger (81), Keith Richards (81), Ronnie Woods (78), Bill Wyman (88), Mick Avory (81), Ricky Fenson (80), Palito Ortega (84), Yoko Ono (92), Raúl Lavié (87), Amelita Baltar (84), Arnaldo André (82), Joan Manuel Serrat (82), Joaquín Sabina (76), Pedro Almodóvar (76) y millones más de anónimos que –como como ellos, ellas, Lionel, Luis, Sergio y Jordi– no son viejos ni viejas, sino que están en otra etapa de sus vidas y en plenitud.
¿Qué es lo que no se entiende? “Este día no significa mucho para mí… Cuando cumplí un año, seguramente mi madre (Leonor Acevedo Suárez) celebró. Aquellos doce meses eran toda mi vida. Hoy, usted me pregunta qué significa cumplir 85… Debo decirle que… muy poco. Se trata solo la 85ava parte de mi vida”, me dijo Jorge Luis Borges, el gran maestro, durante una entrevista para la tele.
Era el 24 de agosto de 1984. Después de aquella respuesta que –palabras más palabra menos– recibí en silencio y, lo aseguro, sin comprender, me reuní con él socialmente unas pocas veces más para compartir momentos simples, sencillos, graciosos (el viejo maestro era un fino humorista). Profundos, inolvidables. Sé que algo –no mucho– conocí a Borges y que me aceptó como tertuliano.
Algunas veces dialogábamos en el tan mítico como histórico café La Biela, frente al mismísimo cementerio de la Recoleta, hacia donde don Jorge miraba sin ver con sus manos apoyadas en descanso sobre el cayado de su bastón. Siempre inconsulto, Ricardo, el calvo mesero, servía un café ristretto y un té en hebras. Yo iba por el primero. Con las campanas de la iglesia Nuestra Señora del Pilar, ubicada allí, a unos 200 metros, donde los jesuitas la construyeron en el 1732, sabía que eran las seis de la tarde. “Hora del Ángelus…”, recordaba que decía su madre. También era el momento de desandar el camino. Lentamente lo acompañaba. Caminábamos primero unos pocos pasos hacia el Paseo de Chabuca Granda y –desde allí– hasta el 994 de la calle Maipú, donde vivía en el sexto piso.
TIEMPO DE DICHA
“La vejez (tal es el nombre que los otros le dan) / puede ser el tiempo de nuestra dicha. / El animal ha muerto o casi ha muerto. / Quedan el hombre y su alma. / Vivo entre formas luminosas y vagas / que no son aún la tiniebla…”, dije una tarde en su presencia. ¿El tiempo de la dicha? “Sí, Cicerón estaba equivocado cuando escribió, en ‘Senectute’, que ‘la vejez es la peor edad del hombre’”, respondió.
Guardé silencio. Recordé, mientras andábamos, que aquel poema –“Elogio de la sombra”–, que Borges escribió en 1969, concluía con cuatro sencillas palabras: “Pronto sabré quién soy”. Casi finalizaba agosto de 1985. Nos despedimos con un afectuoso apretón de manos. En el fin de aquel año marchó a Suiza, donde también viviera cuando quinceañero entre 1914 y 1919. No regresó. Su noche eterna transcurre – desde el 14 de junio de 1986– en el cementerio de los Reyes, Ginebra. Allí fue inhumada toda su vida, aunque sobrevive en sus obras y legado.
Desde su ausencia comprendí que Borges, cuando aquel último paseo, me indujo a reflexionar sobre el paso de los años. Sobre el envejecimiento. En la senectud. Inusual, tal vez, a los 35. Cuando don Jorge nació, la esperanza de vida en la Argentina la medicina la estimaba en torno de los 40 años. Borges partió cuando le faltaban pocos días para cumplir 87.
A quienes inevitablemente alguna vez lo consultamos sobre la muerte, con ironía solía responder que “no” podía imaginar, “siendo tan viejo, que pudiera conocer algo nuevo”. Sospecho que su encuentro con la Parca hubo de ser “para alquilar balcones”. Especular sobre el paso de la vida a la muerte o… a la otra vida, para quienes creen en que la hay en un posible más allá, desde siempre es un tema atrapante. Envejecer, también. Aunque en ambas situaciones es común que se vean esos temas como propios de las otredades.
MATUSALÉN
¿Qué es lo viejo? ¿Qué es ser viejo? ¿Quién es viejo? Aunque casi es una expresión caída por derribo, hasta no mucho tiempo atrás ser señalada o señalado como “más viejo que Matusalén” socialmente determinaba y no positivamente. Así llamado, el hijo de Enoc, el padre de Lamec y, también, el abuelo de Noé –el constructor del arca antediluviana– en el libro del Génesis, al parecer, nació en el Antiguo Oriente Próximo en el 3074 y murió en el 2015 antes de nuestra era. No es un error. No. Según esos textos sagrados para cristianos, judíos y musulmanes, vivió 969 años. Existen aún quienes lo señalan como “el hombre más longevo de la historia”. ¿Habrá sido así? ¿Será así o solo será una relevante y muy respetable cuestión de dogma o fe? ¿Será acaso metafórico?
PENUMBRA
Vuelvo a Borges y a su “Elogio de la sombra” que fragmentariamente recuerdo… “Siempre en mi vida fueron demasiadas las cosas; / Demócrito de Abdera se arrancó los ojos para pensar; / el tiempo ha sido mi Demócrito. / Esta penumbra es lenta y no duele; / fluye por un manso declive / y se parece a la eternidad. / (…) Mis amigos no tienen cara, / las mujeres son lo que fueron hace ya tantos años, / las esquinas pueden ser otras, / no hay letras en las páginas de los libros. / Todo esto debería atemorizarme, / pero es una dulzura, (…) pronto sabré quién soy”.
Sospecho que Borges sentía que aquel del 85 era parte de su último viaje. Tal vez, sus ojos que no veían se miraban en aquel Hamlet que, atormentado –como William Shakespeare lo creó– sostiene que “la conciencia, así, hace a todos los cobardes y, así, el natural color de la resolución; se desvanece en tenues sombras…”.
El relato de los tiempos produce sentido. Lionel, Luis, Sergio y Jordi no son viejos. Diego Bernardini, médico que recorre una y otra vez la aldea global para explicar de qué se trata la “nueva longevidad”, suele comentar que “en la adolescencia, te preguntas qué quieres ser de mayor; a los 40 años, miras qué has hecho con tu vida; cuando ya has cumplido con los demás, te planteas qué quieres hacer con el tiempo que te queda”.