“La seguridad de Israel es un asunto de seguridad nacional”, expresó la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, la demócrata Nancy Pelosi, al pronunciarse sobre el conflicto israelo-palestino. En un comunicado pidió un alto al fuego y enfatizó que “Israel es nuestro amigo y aliado en Medio Oriente con el que compartimos valores”. Pelosi también sostuvo en su nota que el grupo terrorista Hamás” aprovechó una situación inestable para iniciar las hostilidades”.
Al referirse ayer sobre la escalada de violencia en Israel y la Franja de Gaza, Pelosi advirtió que “tras más de una semana de hostilidades, se ha hecho aún más evidente la necesidad de un alto el fuego. Debe haber un esfuerzo serio por parte de ambas partes para poner fin a la violencia y respetar los derechos del pueblo israelí y palestino”. Y agregó: “Es de interés para la seguridad nacional de Estados Unidos apoyar la seguridad de Israel. Hamás aprovechó una situación inestable para iniciar las hostilidades contra Israel, lanzando más de 3.000 cohetes, y como siempre, Israel tiene derecho a defenderse”. “Es con respeto a las vidas de israelíes y palestinos que los líderes deben esforzarse por alcanzar la paz a través de una solución negociada de dos estados”, concluyó Pelosi.
PUEDE EXTENDERSE
Por su parte, el más alto oficial militar estadounidense advirtió a Israel del riesgo de que el conflicto con los militantes palestinos de Hamás se extienda más allá de Gaza, e insistió en que “a nadie le interesa que continúen los combates”. “Hay una cantidad significativa de bajas y creo que ese nivel de violencia causa desestabilización más allá de Gaza”, dijo a periodistas el jefe del Estado Mayor Conjunto estadounidense, Mark Milley. Más de 200 palestinos, incluidos 61 niños, han muerto desde el estallido de hostilidades la semana pasada entre el Estado judío y grupos palestinos armados en la Franja de Gaza, según autoridades locales. Diez personas murieron en ataques con misiles lanzados contra Israel.
“Creo que cualesquiera que sean los objetivos militares, tienen que ser sopesados con otras consecuencias”, acotó Milley. “En mi opinión, la desescalada es lo más inteligente que pueden hacer todas las partes en este momento”, aseguró el militar estadounidense.
La violencia entre Hamás e Israel, iniciada por manifestaciones en Jerusalén Este ocupada por Israel, es la peor que se ha registrado desde el 2014. Los militantes palestinos han disparado unos 3.350 misiles contra Israel, que ha respondido con continuos ataques aéreos que, según ha dicho, van dirigidos a jefes de Hamás e infraestructura militar.
HAMÁS, CON GRAN ARSENAL DE COHETES
El movimiento islamista palestino Hamás, en el poder en la Franja de Gaza y en guerra abierta con Israel, demostró que puede atacar más lejos y con más fuerza y crearle problemas al ejército israelí. Hamás, que controla el enclave sometido a un bloqueo israelí desde hace 15 años, sorprendió a Israel con la potencia y la densidad de sus ataques. Desde el 10 de mayo, cuando estalló el enfrentamiento, más de 3.000 cohetes fueron disparados desde la Franja de Gaza hacia Israel, indicó el ejército israelí. Esta vez Hamás decidió atacar con ráfagas de cohetes, de hasta un centenar en pocos minutos con el objetivo de saturar el sistema de defensa antimisiles “Cúpula de Hierro” de Israel. “El hecho más impresionante de esta guerra es cómo pudieron disparar tantos cohetes en tan poco tiempo e incluso simultáneamente”, dice Fabian Hinz, un experto independiente especializado en armamento en Oriente Medio.