Como si no bastara con el ingreso ilegal de productos de consumo masivo y primera necesidad al país, pues la realidad es que se volvió una práctica normal adquirir azúcar, domisanitarios, elementos de limpieza o higiene, hasta alimentos y combustible, ahora también se habla de insumos de odontología que también permean a través del contrabando.
Sí, insumos para tratamientos odontológicos que ingresan al país en un 30% a 40% son de contrabando, lo que significa que no están registrados en las instituciones pertinentes, y se estima que rondaría los US$ 4 millones anuales el valor de los mismos, que a la vez están evadiendo impuestos. Así lo indicó Juan Carlos Arce, miembro de la Cámara Paraguaya de Productos y Equipos Médicos Odontológicos, quien aseguró que el sector se encuentra muy preocupado ante la inminente práctica.
“Estamos preocupados porque ha crecido en los últimos tiempos, el 30% o 40% de los insumos ingresan de forma ilegal, la mayoría no está registrado por el Ministerio de Salud. “El contrabando es una cadena, serían unos US$ 4 millones de manera anual lo que mueve”, expresó en contacto con la 1020 AM.
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Promos desde Foz
El referente del sector mencionó que por Ciudad del Este se da un ingreso fuerte, y el mecanismo sería a través de empresas de Foz de Yguazú que contactan con los profesionales y ofrecen a modo de promoción, si bien Arce indicó no saber cómo hacen para pasar la frontera, pero que se tratan de productos pequeños con precios desde G. 25.000, dijo.
El denunciante señaló que prácticamente todos los insumos que se utilizan en los consultorios ingresan de contrabando, con decir que hasta el “metalsito” o los brackets para el tratamiento de ortodoncia son de procedencia ilegal, no están registrados como óptimos, a más de generar sobrecostos a los pacientes pues en vez de utilizarlo por 2 años en promedio, se prolonga a 4 años incluso y es el profesional quien termina beneficiado.
“Un profesional que usa estos productos de contrabando, está causando perjuicios a su paciente y no precisamente lo está curando”, sentenció Arce, al tiempo de remarcar que todos los insumos deben estar registrados por el Ministerio de Salud para demostrar su origen y que sea apto para utilizarlo en la boca.