Las exportaciones de carne porcina están teniendo un crecimiento importante en los primeros cinco meses del año. De enero a mayo último se facturó un 37,8 % más que en similar período de 2024.
Teniendo en cuenta los acontecimientos recientes, es probable que a partir de este año las ventas de la carne de cerdo tengan un mayor aumento teniendo en cuenta las recientes medidas de Taiwán de eliminar los impuestos que paga hasta ahora el producto paraguayo para ingresar a ese país. Por eso se espera un “boom económico” de la mano de la industria porcina y los productores del sector, según el pronóstico del directivo de la Asociación Paraguaya de Productores de Cerdos (APPC), Enzo Mannarini.
Las cifras que se tienen hacen pensar que el vaticinio del productor ganadero está bien fundamentado. De acuerdo con los datos del Servicio Nacional de Salud Animal (Senacsa), de enero a mayo de este año las ventas al exterior de productos porcinos tuvieron un alza del 37,8 % en su valor factura por haber embarcado el 42 % más en volumen. Debido a ello ingresaron 15,7 millones de dólares, frente a los 11,4 millones de dólares que se habían facturado en los primeros cinco meses de 2024, lo que constituye un alza de 4,3 millones de dólares más para las empresas nacionales del sector.
La República de China (Taiwán) ha sido el principal comprador de la carne porcina nacional en lo que va del año, pues en términos monetarios se llevó el 80,9 % de todo lo exportado. Uruguay, Brasil y Georgia fueron los otros que adquirieron las partidas restantes.
Teniendo en cuenta que Taiwán es el más importante destino de ese tipo de carne, la medida que ha adoptado últimamente el Gobierno de esa nación para alentar la exportación nacional es de suma importancia. El arancel que actualmente paga ese producto paraguayo que ingresa al mencionado país es del 12,5 %. Desde el 5 de julio venidero será de 0 %, es decir, ya no pagará nada. Esa ventaja arancelaria tendrá un fuerte efecto en las compras del producto paraguayo, porque será más barato, lo que ayudará al aumento en la adquisición de parte de los consumidores chinos.
Teniendo en cuenta las nuevas medidas de Taiwán, los criadores de cerdos de nuestro país pretenden exportar este año 15.000 toneladas de carne porcina, que es superior a las 11.000 toneladas que se han embarcado en 2024, lo que representará un aumento del 36 %. Los requerimientos chinos de dicho producto rondan las 100.000 toneladas al año, por lo que Paraguay puede incrementar sus envíos teniendo en cuenta la ventaja arancelaria que tendrá desde julio y su alta capacidad de producción de porcinos. La competencia con los otros países proveedores puede ser favorable si se considera que ya no tendrá la carga arancelaria que tenía.
Este hecho favorecerá a la producción del sector y a la industria paraguaya que tienen ahora un nuevo desafío ya que se encuentran preparadas para lo que vendrá.
Uno de los directivos del área refirió que esta novedad hará que muchos productores avancen en los proyectos que ya tienen diseñados. Resaltó que incluso hay actores de la cadena de producción que tienen construcciones en marcha y otros que están por arrancar.
La situación actual representa una gran oportunidad para nuestro país, ya que permitirá incluir a miles de pequeños productores de cerdo al sistema productivo formal, dar más fuerza al desarrollo del área y hacer que el país se vaya posicionando como un exportador de ese tipo de carne.
La presidenta de la Cámara Paraguaya de Industrias Porcinas, Marta Mareco, se congratuló por el arancel cero para ese producto paraguayo y reconoció el trabajo realizado por el Gobierno para ello.
El hecho de que la República de China haya decidido bajar a cero el nivel del arancel de la carne porcina paraguaya es una medida de gran importancia económica. Pero se trata fundamentalmente de una decisión de orden político, que ha tomado Taiwán para favorecer a Paraguay, uno de los contados países del mundo que tiene relaciones diplomáticas con esa nación y con la que le une una fuerte ligazón desde hace décadas. Por eso los ganaderos, industriales y gente vinculada a la producción porcina deben aprovechar adecuadamente la medida arancelaria.