El informe de Política Monetaria (IPoM) del Banco Central del Paraguay (BCP), donde las proyecciones se mantienen para fin de año en una expansión económica del 0,2%, resaltan algunos puntos que se toman como riesgos. En el ámbito local, los riesgos para la actividad económica, especialmente agrícola, se derivan principalmente de la evolución del clima y de la disponibilidad adecuada de fertilizantes, enfatiza la banca matriz.
“El clima ha evolucionado favorablemente en los últimos meses, lo cual benefició a los cultivos de soja (zafriña) y maíz. Además, existen buenas perspectivas para la producción de trigo”, sostienen. Sin embargo, en lo concerniente a la próxima campaña sojera 2022/2023 existen probabilidades de que se registre nuevamente una sequía por el fenómeno La Niña.
Conforme a los datos de comercio exterior, las importaciones de fertilizantes (en volumen) en meses recientes se situaron por debajo de los promedios históricos y, en ese sentido, esta situación, de no regularizarse, podría influir negativamente en el rendimiento de la producción de soja.
En tanto, en el escenario base, la proyección de crecimiento del producto interno bruto (PIB) del 2022 se mantuvo en 0,2%, aunque hubo una recomposición sectorial y por componentes del gasto, según Miguel Mora, economista jefe del BCP. “La fuerte sequía que se materializó entre finales del 2021 e inicios del 2022 produjo cuantiosas pérdidas en la cosecha de la soja y otros productos agrícolas.