El abogado Óscar Tuma, representante legal de Stephan Le Droumaget, padre de Juliette, anunció que mañana estarán entregando a los fiscales que investigan el caso un documento en el que solicitan varias diligencias. Piden información sobre las líneas telefónicas de la madre Lilian Zapata y el padrastro Reiner Helmut Oberuber para confirmar si fueron desactivadas o si se eliminó información. También esperan tener la ubicación georreferencial de los mismos celulares el día de la desaparición y posterior a ello.
El pedido a las compañías telefónicas es para que faciliten información si las líneas de ambos fueron reactivadas desde el 14 de abril hasta el 15 de mayo, y enviar la ubicación de esa reactivación. “Son diligencias que proponemos como equipo de trabajo”, explicó el abogado. Tendrían información de que se habrían eliminado datos o informaciones que contiene el celular. “El teléfono le solicitaron después de varios días, tuvieron 15 días para que la Fiscalía obtenga esos celulares”, añadió.
Primeramente, solicitan un examen toxicológico de sangre y cabello de Lilia Zapata, madre de la niña, para determinar si la misma consume algún tipo de estupefaciente. También sobre el perfil psicológico de ambos responsables de la niña, la madre y el padrastro.
Por otra parte, extracción de la sangre de la madre para comparar los resultados de la sangre encontrada en la investigación con el ADN de la misma. “No es necesario que el padre se haga la muestra de sangre para el ADN, se puede hacer la madre acá y se ahorra un montón de tiempo”, explicó Tuma en contacto con La Nación.
Lea más: Padre de Juliette pide acceso a carpeta fiscal
Igualmente, piden el acceso a la copia de carpeta fiscal para analizar las declaraciones testificales y los otros elementos de prueba, y remitir una copia al papá, Stephan Le Droumaget. “Está interesado en saber qué obra en la carpeta fiscal, tiene derecho natural y legal de saber qué es lo que ocurre”, sostuvo.
El equipo fiscal conformado para investigar la causa está compuesto por los agentes María Irene Álvarez, Gedeón Escobar y Carlos Maldonado.
Un mes de desaparición
El 16 de mayo pasado se cumplió un mes de la misteriosa desaparición de la niña Juliette en el distrito de Emboscada. Numerosos allanamientos, rastrillajes de la zona y megaoperativos de búsqueda ya fueron ejecutados en el distrito cordillerano, sin encontrar hasta el momento indicios del paradero de la menor.
Mira esto: Caso Juliette: El papá es el único que no tiene un manto de dudas sobre él, dice abogado
Dejanos tu comentario
Hallan cuerpo en río Monday: sería de hombre reportado como desaparecido
Ciudad del Este. Agencia Regional.
A las 19:00 fue hallado un cadáver en el río Monday, en el Km 16, a unos dos mil metros de la Ruta PY02, de Minga Guazú. Por las características físicas y de vestimenta, el hombre sería Marcos Antonio Domínguez Amarilla (40), según el reporte de la Comisaría 8a.
Se presume homicidio, porque el cuerpo encontrado tiene heridas de arma de fuego en la cabeza y en la pierna. El cuerpo fue trasladado a la morgue del Hospital de Minga Guazú, donde esperan al médico forense y al fiscal de turno. Fueron pescadores los que divisaron el cuerpo en el río.
La desaparición había sido denunciada por su exconcubina, Ninfa Arias Estigarribia, después de hablar por última vez con él, el sábado 23 de noviembre.
El hombre estaba siendo buscado intensamente, por agentes de la División de Búsqueda y Localización de la Policía Nacional, en Alto Paraná. Su vehículo fue encontrado totalmente incinerado, el domingo 24 de noviembre.
Agentes de la citada división policial a cargo del comisario Rubén Ramírez, recorrieron hoy varios sitios por donde pudo haber estado, la casa donde vivía y en busca de personas con quienes pudo haber hablado.
Primero fueron hoy hasta el Ministerio Público, donde se reunieron con familiares de Marcos Antonio y con la expareja, en la unidad de la fiscal Cinthia Leiva. La denunciante manifestó que tuvo una última conversación telefónica con el hombre el día sábado, en horas de la tarde.
Por su parte, Guillermo Domínguez López, padre del que hasta ese momento estaba siendo buscado, había exhibido fotografías del recorrido que realizo su hijo, en las horas previas a su desaparición, según datos del GPS, que habían sido proporcionados por funcionarios de la empresa donde trabaja.
Inmediatamente después, el personal de búsqueda fue hasta el barrio Don Bosco de Ciudad del Este, donde habría estado recorriendo. Verificaron grabaciones de circuito cerrado que no aportaron ningún dato importante, según los intervinientes.
Puede interesarle: Reo condenado por abuso sexual de niño fue apuñalado en el penal de CDE
Esta tarde fueron hasta una vivienda (inquilinato), del Barrio San Isidro de Ciudad del Este, donde el propietario informó que Marcos Antonio fue su inquilino, pero hace un mes dejó dicha casa.
Los policías continuaron el recorrido y llegaron hasta el local comercial Auto repuestos San Ramón, cuyos propietarios serían amigos de Marcos Antonio, pero no se encontraban por estar de viaje, según un personal del lugar.
Vehículo incinerado
En cuanto al vehículo del desaparecido, fue encontrado totalmente quemado, en la mañana del domingo 24 de noviembre, en el Km 17 Acaray, a 2 mil metros de la Ruta PY02, a unos 50 metros de “Calle 2 mil”, como es conocida la vía, según reportó ese día la Comisaría 8.ª de Minga Guazú.
El vehículo era un Toyota, modelo Runx, color plateado, con chapa HGM 219, inscrito a nombre de Francisco Ferreira Segovia. A pesar de su incineración total, pudo identificarse el número de la placa. Luego se supo a quién pertenecía el vehículo. Cuando la denuncia fue realizada por la expareja, se confirmó que el vehículo destruido pertenecía a Marcos Domínguez Amarilla.
Puede interesarle: Docente denunció extravío de sus dos bebés del Hospital Central de IPS
Dejanos tu comentario
Violencia contra mujeres: cifras de una triste realidad en Itapúa
Por Rocío Gómez, corresponsal en Itapúa
Vamos a hacer una comparación asquerosa, hablemos del famoso “pique” o pulga de pie. Cuando tenés un pique, normalmente en los pies, lo primero que sentís es una molestia y lo único que ves al comienzo es un pequeñito punto negro. Si sos citadino o extranjero, lo primero que podés pensar es una espina, o una picadura de algún bicho, pero si sos paraguayo, inmediatamente sabrás que ese puntito negro significa que debajo de la piel hay más de 200 huevos de pique y pus.
Hoy quiero comparar el pique con la cantidad de denuncias recepcionadas por violencia contra las mujeres. Porque el puntito negro solo es la punta del problema, al igual que las denuncias son solo la punta del problema muchísimo mayor de violencia que enfrentan las mujeres en el interior.
Denuncias y juicios
En Itapúa, desde enero hasta octubre del 2024, el Ministerio Público recepcionó 1.308 denuncias por violencia familiar, entre ellas maltrato verbal, golpes, abuso sexual, manipulación y amenazas.
En el Palacio de Justicia de Encarnación, desde enero a octubre del 2024, se registraron 4 casos de feminicidio y 244 casos de violencia familiar que llegaron a instancias judiciales a través de los juzgados de garantías del n.º 1 al 5 en Encarnación, el juzgado de garantías de María Auxiliadora, el juzgado de garantías de San Pedro del Paraná y el juzgado penal de la adolescencia.
Lea más: 25N: un día que recuerda la lucha férrea y constante contra la violencia hacia las mujeres
Respecto a condenas en este año, no podemos dejar pasar dos ejemplares condenas por feminicidio y una condena por tentativa de feminicidio. La primera fue de 30 años al expolicía, suboficial Ramiro Rodas, quien asesinó a su pareja Alicia Fernández de 37 años en el distrito de San Juan del Paraná. El feminicida la violó, mordió y estranguló, y fue el hijo que tenían en común quien encontró a su mamá sin vida a la mañana siguiente.
La segunda condena sentenció a 23 años a Lelio Lugo, un hombre que golpeó a su pareja Lourdes Ramona Mareco de 49 años en la cabeza y la arrojó al empedrado desde su vehículo en movimiento en Pirapey km 40. Y la última condena por feminicidio en grado de tentativa fue a Javier Maqueda Garay, sentenciado a 17 años de prisión por atacar con un cuchillo a su expareja Laura Garcete, a quien hirió en el rostro y cuello, sobrevivió porque los hermanos la auxiliaron. Ocurrió en Cambyretá.
Todos estos casos son un puntito negro de la violencia que existe en el interior del país, dicho en otras palabras, la punta del iceberg.
Falta de conocimiento de las leyes
Una de las magistradas del tribunal de sentencia que estuvo detrás de varias condenas ejemplares este y otros años es la jueza Liz Sanabria de Gneiting, quien expresa la preocupación desde el ámbito judicial por la falta de denuncias a raíz del desconocimiento de las leyes, el temor por la falta de protección y la falta de tribunales y juzgados especializados en violencia contra la mujer.
“Nos damos cuenta del aumento significativo de violencia contra las mujeres y por ende contra niños, por la cantidad de casos de juicios que manejamos por día. Son prácticamente 5 juicios por día y de ellos 3 son abusos sexuales en niños y 2 de violencia. Luego se divide en los demás hechos punibles comunes, hurto, homicidio, estafa, pero el mayor índice en primer lugar es el abuso sexual en niños, la prestación alimentaria y la violencia familiar donde generalmente la principal víctima son las esposas, y las víctimas colaterales, los hijos”, expresa la magistrada.
Desde el estrado, los jueces escuchan todo tipo de historias, pero las que más consternan son sobre mujeres que no se animan a denunciar, e incluso que si denuncian, no tienen respuesta efectiva del Estado ni acceso a la justicia. Su principal inquietud es que las mujeres tengan un acceso efectivo a la justicia, con respuestas prontas por parte de la Fiscalía y emisiones de medidas cautelares inmediatas por parte de los juzgados de paz. Cada denuncia con respuesta efectiva de los órganos de justicia significa que se puede salvar una vida.
Sin embargo, los jueces preocupados en Itapúa por esta realidad no solo luchan contra la violencia desde sus despachos y salas de juicio, sino que viajan al interior del séptimo departamento para capacitar sobre las leyes que amparan a las mujeres víctimas de violencia, enseñando tanto en escuelas como en barrios las vías legales para proceder apenas sufren amenazas o golpes.
Hace algunas semanas implementaron como capacitación el proyecto “el juez que yo quiero” de la Corte Suprema de Justicia y capacitaron en los distritos de Tomás Romero Pereira, Cambyretá, Carmen del Paraná y comunidades indígenas de Trinidad y otros puntos, rotando los jueces que participaron según disponibilidad de tiempo.
“Tratamos de llegar a la gente para que sepa que no está sola, y para que conozcan cuáles son los lugares y los números a los que pueden recurrir. Llevamos hace poco el móvil mujer al distrito de Carmen del Paraná y recibimos muchas consultas sobre cómo denunciar en casos de violencia y eso es porque las políticas públicas de prevención no están funcionando tan bien y no están llegando a los sector más alejado de las redes sociales y de la televisión, donde se suelen ver los números de fonoayuda por ejemplo. Se debe llegar a la mujer rural, y no solo a las mujeres de la ciudad”, dice con desazón Sanabria.
La mujer rural
En el interior se vive una realidad bastante distinta que en la ciudad, y con las experiencias de capacitar sobre leyes, pudieron observar los marcados horarios, permisos y trabajo que tienen las mujeres. Cuando las actividades rondaban las 17 horas, la mayoría de las mujeres se retiraron porque alegaban que debían meter las vacas a las casas, pero luego confesaban que sus maridos no las dejaban estar fuera del hogar una vez que oscurece.
“La mujer rural trabaja muchísimo y a la par del hombre, y donde está el reconocimiento de los derechos que ella tiene. Es una muestra clara que existe el machismo muy arraigado en nuestra sociedad. Lo vemos en todos los ámbitos. El hombre aún no tiene ese respeto de igualdad que debe tener a las mujeres”, apunta la magistrada.
Si bien, la cantidad de juicios por abuso y violencia indican que la gente se está enterando que puede denunciar, la realidad demuestra el miedo que sufren las víctimas. La mayoría de las denuncias llegan por vecinos o personas que conocen sobre los episodios de violencia en las casas. También sucede que una vez que llegan los casos al Palacio de Justicia, las mujeres se quieren desdecir, negar la denuncia y salvar a su pareja o marido, ya sea por dependencia emocional o dependencia económica.
La jueza Sanabria forma parte del proyecto de la creación de los tribunales especializados en violencia contra la mujer, que no fue contemplado en la Ley 5.777. Ella, junto a sus colegas y todos los funcionarios de los órganos de justicia, aguardan la oportuna aprobación e implementación de este proyecto para tratar cada caso de violencia contra las mujeres como corresponde desde el sur del país.
Saquemos el pique
Es hora de sacarnos el pique y el pus que hay detrás, denunciemos los casos de violencia en la comisaría más cercana, los juzgados de paz, la Fiscalía, las oficinas del Ministerio de la Mujer y de la Defensoría Pública, o directamente llamando al 137. Si necesitas orientación legal o psicológica podés llamar al (021)452051/2.
Le puede interesar: ¡A preparar el tereré! Anuncian días sumamente calurosos
Dejanos tu comentario
Fiscalía dice que es prematuro sacar conclusiones definitivas
El Ministerio Público, encabezado por Emiliano Rolón Fernández, emitió ayer viernes un comunicado afirmando que resulta prematuro sacar conclusiones sobre si el fallecido diputado y dirigente de Amambay Eulalio “Lalo” Gomes Batista disparó o no contra los efectivos policiales durante el allanamiento en su vivienda en la madrugada del lunes 19 de agosto, en el marco del operativo Pavo Real II.
“Las evidencias deben ser evaluadas en forma conjunta y armónica, conforme el artículo 175 del Código Procesal Penal. Para ello serán determinantes los resultados de informes técnicos, pericias, testimonios y otras diligencias aún pendientes”, indica.
Añade que “serán determinantes las diligencias pendientes. El elemento invocado, según la difusión, deberá observar dicho proceso de integración, por lo que es prematuro intentar conclusiones definitivas, que solo enervarán el normal proceso de la investigación”.
El posicionamiento de la Fiscalía surge a raíz de las disparidad en los informes dados a conocer por el Ministerio Público y la Dirección de Investigación Científica y Tecnológica de la Universidad Nacional de Asunción (UNA) sobre las pruebas balísticas practicadas a Gomes.
INFORME DE LA UNA
De acuerdo al informe de la UNA se encontraron valores de plomo, bario, antimonio en los brazos y manos del legislador. Los valores en el brazo izquierdo de plomo ascienden a 139, bario a 237, antimonio a 11,4. En la mano, los índices de plomo son 224, bario 277 y antimonio 21,5.
En cuanto al brazo derecho, el plomo es menor a 5, la detección de bario es de 258 y antimonio menor a 10. En la mano, el plomo hallado fue de 120, bario 332 y antimonio menor a 10. Esto demuestra la presencia de residuos de disparos de arma de fuego y fueron hallados a partir de las muestras de hisopos tomados luego del allanamiento en su vivienda en Amambay, que derivó en el fallecimiento de Gomes.
“El Ministerio Público garantiza objetividad y basará los requerimientos en las constancias emergentes de la investigación, según las reglas del debido proceso, que su vez, es el norte del Estado de derecho, premisa fundamental del modelo constitucional vigente”, sostiene el documento firmado por Rolón.
Dejanos tu comentario
Informe de CGR expone el apuro fiscal para blanqueo a Bataglia
El Ministerio Público decidió desestimar una denuncia por daños patrimoniales estimados en más de G. 1,5 billones sin haber tomado en cuenta todos los elementos detectados por la Contraloría General de la República (CGR). Los fiscales encontraron documentos respaldatorios por menos de la mitad del monto denunciado.
Un detallado informe basado en la auditoría realizada por la CGR al IPS deja aún más al descubierto el apuro de la Fiscalía por blanquear al extitular del ente previsional Vicente Bataglia. El mismo documento que fue remitido al Ministerio Público, cuyos fiscales desestimaron a las apuradas una denuncia sobre el caso, revela datos que no fueron tenidos en cuenta por los agentes.
En concreto, la CGR remitió varios informes de auditoría que revelaron posibles daños patrimoniales por más de G. 1,5 billones, aproximadamente USD 130 millones. Sin embargo, de forma sorpresiva, la Fiscalía solicitó la desestimación de la denuncia contra Bataglia. Darío Ortega, director jurídico de la CGR, aseguró que el Ministerio Público no tuvo en cuenta todos los documentos o que incluso se tomaron elementos que no forman parte de la denuncia para el pedido de desestimación.
Los agentes fiscales encontraron documentos que respaldan pagos por G. 350.000 millones (USD 50 millones). La denuncia era por G. 1,5 billones (USD 130 millones). O sea dejó de averiguar entre 80 y 90 millones de dólares sin tener la documentación”, dijo Ortega días atrás al canal GEN.
El equipo de investigación de Nación Media accedió a los informes comparativos entre las auditorías y el pedido de desestimación presentado por la Fiscalía, dando inicio hoy a una serie de varias entregas sobre las groseras omisiones realizadas por los representantes del Ministerio Público.
UNO DE VARIOS EJEMPLOS
Uno de los varios puntos utilizados por la Fiscalía para el pedido de desestimación de la causa contra Bataglia tiene que ver con un millonario crédito otorgado al IPS por un banco local.
En concreto, el informe final de la CGR sobre el IPS concluyó que había una discrepancia significativa entre el monto de la línea de crédito aprobada por la Resolución del Consejo de Administración y el pagaré firmado con la entidad financiera.
La auditoría encontró que, aunque se aprobó un préstamo de G. 50.000.000.000, el pagaré inicial se emitió por G. 65.379.679.514, incluyendo intereses y otros montos adicionales. Esto levantó dudas sobre la transparencia y la adecuada gestión de los fondos del IPS, sugiriendo posibles riesgos legales y financieros.
La Fiscalía argumentó que el contrato y el pagaré original, aunque por un monto mayor, habían sido aclarados y corregidos. En agosto de 2023, meses después de la auditoría y del cierre del ejercicio fiscal 2022, se realizó un intercambio de pagaré, corrigiendo el monto a G. 50.000.000.000 más los intereses compensatorios. Según la Fiscalía, esto subsanó la discrepancia señalada y, por lo tanto, no justificaba una investigación penal, ya que la corrección había sido formalizada.
Sin embargo, la propia Fiscalía reconoció en la argumentación del pedido de desestimación la existencia de las irregularidades detectadas por la Contraloría. Aunque el pagaré fue corregido, la modificación se realizó después del cierre del ejercicio fiscal 2022 y en la etapa final de la auditoría. Esto confirma la observación inicial de la CGR: la discrepancia existió y representó un riesgo real para el IPS y sus asegurados.
Fuentes del órgano extrapoder señalaron, sin la intervención y observación de la auditoría, que el IPS podría haber enfrentado graves consecuencias legales y financieras en caso de incumplimiento de pago. La CGR subrayó que el cambio de documentos no exime a los responsables del IPS de sus acciones u omisiones previas, las cuales comprometieron la transparencia y la gestión adecuada de los fondos