El periodista uruguayo Javier Sosa Briganti dejó ayer martes su vida terrenal a raíz de complicaciones de salud ocasionadas por el COVID-19. Conocido por sus enérgicos comentarios y críticas deportivas, Briganti luchó hasta los últimos segundos contra la enfermedad que hace tan solo 8 días atrás le había arrebatado a su hija Natalia.
En redes sociales, internautas clamaron su nombre y expresaron sus más sinceros pésames por la gran pérdida para el periodismo nacional. Otros viralizaron un video que resultó impactante por las palabras y llamado a tomar conciencia que realizó Sosa Briganti, con respecto a las medidas sanitarias y el relajo ciudadano para evitar el contagio del COVID-19.
Te puede interesar: Sequera: “Preocupa que vaya aumentando y colapse el sistema sanitario”
Con los mismos ímpetu y firmeza de siempre se le escucha al uruguayo a criticar fuertemente la ignorancia de aquellas personas que niegan al coronavirus o que consideran que es una mentira creada por las autoridades y organismos internacionales. “Dicen que es una mentira, pero la gente se está muriendo todos los días”, manifestó en su último video.
En ese sentido, aseveró que el problema real son las personas que se aglomeraron en las calles, parques, casas y plazas para usarlas de “recreo”, según declaró. “Se tomaron esos lugares para hacer la vida que quieren. Todo esto que pasa es a consecuencia de los asados, todos borrachines de mierda, de cantarolas y guitarreadas y fogones prendidos. Donde se ponen a cantar todos sin tapabocas. Se piensan que acá no pasó nada, esos son los culpables”, acotó.
Podés leer: COVID-19 se llevó ayer a Javier Sosa Briganti, días atrás a su hija
Sosa Briganti agregó que después de estos descontroles sociales, estas personas van a sus puestos de trabajo y se acercan al resto de las personas que sí se cuidan. “Están a tu lado en la oficina, en el colectivo, en el banco, en una oficina pública, en un ministerio y así van desparramando y descontrolando el virus. Esto no es problema del ministerio ni del ministro, si es que compró bien o compró mal. Es otro el problema”, reclamó.
El periodista hizo énfasis en esta parte y aseguró que el problema también yace en la Policía Nacional que -según afirmó- “dejó solo al Ministerio de Salud, dejó sola a la población que sí se cuida”. “La Policía nos dejó en manos de delincuentes irresponsables que hacen la vida que quieren, la vida que nos está destruyendo a nosotros, que destruye a tu padre y a tu madre”, culminó.
Sosa Briganti, de 64 años, estaba internado en un sanatorio privado capitalino, sometido a estrictos tratamientos para rehabilitarse del COVID-19, que lo tenía aquejado hace semanas. Estuvo conectado a un ventilador mecánico, con el que se estimulaba la buena respiración, ya que la enfermedad complicó su sistema pulmonar.
Sin embargo, su cuadro, que venía en franca mejoría hace una semana y media, empeoró en las últimas horas y falleció cerca de las 21:00 de ayer martes. Recordemos que el pasado 16 de noviembre, por la misma razón, falleció su hija Natalia.
Dejanos tu comentario
Digna Escurra, la “sirena” que nadó más de 80 horas seguidas y es todavía récord mundial
- Jorge Zárate
- jorge.zarate@nacionmedia.com
- Fotos: Gentileza/Archivo
La Asociación Mundial de Natación en Aguas Abiertas (WOWSA, su sigla en inglés) la tiene en su ranking entre las 10 principales competidoras con hazañas de esta modalidad. La más popular de las nadadoras paraguayas fue también profesora de educación física y promotora del handbol, padeció la dictadura y la trascendió. Aquí un poco de su historia.
Un ritmo, su propia corriente acompañando el río, la brazada constante, respirar la marcha. María Digna Escurra (San Lorenzo en 1928 o 1929 - Asunción, 28 de abril de 2013) sabe que eso es lo importante. Ya pasó por el Deportivo Sajonia y sigue nadando viendo las luces, los fuegos de artificio, oyendo el bullicio de los parlantes que reproducen la transmisión de la radio Comuneros que la viene siguiendo desde Concepción.
Reporteros que van en lanchas a distancia prudente describen una procesión que completan embarcaciones de porte diverso; las canoas de los pescadores y pobladores costeros en una inusitada fiesta popular que inclusive tiene una banda militar sonando en la playa.
Su equipo debe advertir a la gente que no se acerque, nadie la debe asistir, tampoco tocarla, porque su piel de tanto estar bajo el agua tiene daños. Esto a pesar de untarse con aceite de ricino y lanolina, del mercurocromo que se aplicó alrededor de los ojos al arrojarse al agua aquel 22 de marzo de 1957 a las ocho, hora en que comenzó el desafío.
“PODÍA SEGUIR”
Lleva nadando tres días y se acerca a Itá Enramada, piensa que puede seguir, pero Hilario Ortellado, que será su marido, teme por su salud y le pide que deje el agua.
“Llegué bien a Itá Enramada y podía seguir inclusive, pero mi futuro esposo tenía miedo de que me pasara algo, pues yo le había batido el récord a una norteamericana que nadó 80 horas –45 minutos menos– y la habían sacado en coma y a los tres días falleció. Es por eso que salí, pero sin problemas físicos, durante el trayecto no podía tocar nada y comía de todo, milanesas y hasta soyo aguado”.
Han pasado 80 horas y 45 minutos desde que dio las primeras brazadas. Este récord mundial vigente por décadas se estableció un 25 de marzo de 1957.
Digna será desde ese momento la Sirena del río Paraguay.
TENACIDAD, PERSISTENCIA
“Salté a Concepción a las 8:20 un sábado y llegué a Itá Enramada cuatro días después tras nadar 80 horas y 45 minutos”, contó alguna vez Escurra. “Durante la travesía, me acompañaron botes, barcos de la Marina, un médico y dos nadadores durante el día y dos nadadores durante la noche”.
La preparación fue importante: “Recuerdo que pesaba 65 kilogramos y querían que subiera 15 más porque pensaban que perdería muchos kilos durante el recorrido, pero solo subí a 72 kg y con el mismo peso, las mismas pulsaciones y la misma presión arterial llegué hasta el final”, recordó de su hazaña.
Pero llegar hasta ahí le llevó un camino interesante.
Deportista por impronta familiar, probó con la jabalina, carreras de velocidad, handbol, básquetbol y lanzamiento de martillo. Sin embargo, nadar se le daba bien y era lo que más le gustaba hacer mientras estudiaba Medicina y el profesorado de Educación Física.
CIRCUNSTANCIA ESPECIAL
Alguien la convenció de ir a la pileta a practicar como velocista. Así nadó los 50, 100, 200 y 400 metros en estilo libre, pero una circunstancia especial la hizo terminar siendo una nadadora de aguas abiertas.
Cuenta el periodista Hugo Fleitas que todo comenzó luego de la hazaña cumplida por Armando Burifaldi, el Tiburón paraguayo, que nadó en 46 horas los 179 kilómetros y 500 metros entre Asunción y Formosa un 22 de marzo de 1945.
“La natación paraguaya alcanzó un inusitado incremento y Digna Escurra fue la más prominente de sus figuras, batiendo en forma contundente la marca obtenida por Burifaldi”, memora.
“Digna se lanzó a las aguas del río Paraguay, frente a las instalaciones del Club Deportivo de Puerto Sajonia, el día jueves 11 de marzo de 1954, siendo las 5 horas y 55 minutos y llegó a Formosa al día siguiente 12 de marzo a las 20 horas y 38 minutos realizando el recorrido de 179 kilómetros y 500 metros en 38 horas y 25 minutos, marca que señala un récord no superado hasta ahora en nuestro medio”, agrega.
Al poco tiempo, Digna, ya entrenada por el argentino Héctor Segades, hizo el récord de mantenerse por 24 horas seguidas nadando en la piscina del parque Caballero.
UNA ADELANTADA
Cuenta Pedrito García, decano de los periodistas “polideportivos”: “Fue una adelantada a su época, un ejemplo como mujer combativa, digna heredera de las residentas”.
Agrega que “fue profesora de educación física y también una gran impulsora del handbol, al que lograron incluir en los colegios y escuelas como parte de las clases de gimnasia. Una deportista ejemplar, luchadora de la vida, tuvo que ser mamá y papá mucho tiempo cuando su esposo, que era capitán de caballería, Hilario Ortellado, fue preso en época de la dictadura. Pasó muchas vicisitudes y fue un ejemplo. Tuvo una hija médica y un profesor de educación física y durante muchos años tuvo que tomar el mando en el hogar”.
Su marido, el capitán Ortellado, estuvo preso y fue torturado por el caso del cadete Anastasio Benítez en uno de los tantos episodios oscuros de la dictadura. El cadete, según la versión que esgrimió el régimen, habría descubierto un complot de oficiales para derrocar al dictador Alfredo Stroessner. Entonces, acusó al capitán Napoleón Ortigoza, Guillermo Escolástico Ovando y Regalado Brítez, entre otros, a los que sumaron a Ortellado de haberlo matado colgándolo de un árbol en un descampado del barrio Trinidad.
MATERNIDAD
En ese momento sumó la desgracia de que su hijita Marité no sobreviviera al parto. Como el padre estaba preso en Investigaciones, Escurra llevó el cuerpo de la niña hasta esa dependencia para que Ortellado pudiera despedirse. La policía no le permitió el ingreso. A partir de allí se vio forzada a criar a sus dos hijos sola.
En 1970, cansada de enfrentar un caso lleno de irregularidades procesales y de vicios, con ayuda de amigos consigue que su esposo escape de una custodia y se refugie en la embajada de Brasil, donde consiguen asilo.
Regresarían en 1989 con la caída del tirano y, a partir de allí, el recuerdo de su hazaña volvió a hacerse presente entre quienes vivieron aquellas jornadas de algarabía popular que despertaron sus récords en natación.
UN FENÓMENO NACIONAL
Pedrito García, decano de los periodistas especializados en la amplia gama de deportes que están más allá del fútbol, bucea en la memoria: “Viví ese acontecimiento siendo un niño. Mi papá, que fue periodista deportivo también, me llevaba a cuanto evento deportivo había”, cuenta.
En esos años comenzaron los raides que tuvieron en Luis Gilberto Ruiz y María Digna Escurra en natación y en Lorenzo Prieto, en ciclismo, sus más importantes figuras, apunta.
García, en su libro “Deportistas del Paraguay. Memoria y rescate”, los destaca especialmente: “Hay que aclarar que no eran raids controlados por la Federación Internacional de Natación o la federación local, pero siempre estaba la infraestructura de apoyo y el respaldo que daban los clubes involucrados: En el caso de Ruiz, el Mbigua; en el caso de Digna Escurra, el Deportivo Sajonia”.
Recuerda que “una multitud recibió a Ruiz cuando llegó después de establecer el récord mundial de 105 horas lanzándose a las aguas río abajo desde Concepción y llegando hasta Itá Enramada”.
Era todo un evento: “El periodista Carlos Merlo transmitía desde una lancha, iba acompañando, había conjuntos musicales que de noche ejecutaban sus instrumentos para evitar el sueño y espantar los mosquitos a los raidistas. Todo eso nosotros acompañábamos por radio, era un acontecimiento cumbre, singular en una población que no tenía muchos entretenimientos y todo el país estaba pendiente”.
UN HOMENAJE EN PRIMERA PERSONA
La historiadora Ana Barreto Valinotti se mete en su piel: “¿Que si me asustaban los camalotes, los peces, los grandes barcos que pasaban a mi lado o la oscuridad de la noche? Pues al parecer logré superar todos estos miedos. Quizás de esos elementos se componía el mundo donde me sentía más segura y fuerte”, nos dice la Digna Escurra que recrea en un capítulo de su libro “Mujeres extraordinarias de Paraguay”.
Cuenta que “desde que el libro salió no dejo de tener comentarios tan maravillosos sobre Digna e incluso sobre la ilustración que hizo Adri Rojas. La gente parece volver a recordar, tener la sensación de oír el relato en radio o de verla llegar y desfilar por las calles de Asunción. ‘Ya no se ven hazañas así’, me dijo una señora. Yo me quedé pensando. Quizás hoy acaba de soñar con llegar a un podio una niña, nuestra próxima sirena de río. Quizás apenas sea una cuestión de tiempo”, espera.
–¿Cómo llega a vos la historia de Digna Escurra y cómo decidiste hacerla parte de tu libro?
–La historia de Digna Escurra la conocí desde una noticia de prensa al momento de su fallecimiento en 2013. Sin embargo, por una cuestión personal (fui diagnosticada de cáncer unos meses después) no le di continuidad a los aspectos que me llamaron la atención como lo fueron los años de entrenamiento intenso antes de la gran hazaña de nado en el río Paraguay. No fue sino hasta los Juegos Odesur 2022 y las Olimpiadas de París que sentí la necesidad de volver a releer la vida de María Digna Escurra pensándola como un perfil importante desde donde narrar un momento determinado de la historia del Paraguay. Y no lo digo solo por el deporte, sino porque en la mayor parte de su vida tuvo como una prueba durísima mantenerse fuerte frente al régimen de Stroessner. Cada vez que sabía más de ella, cada vez la admiraba más. Cuando la editora de Santillana me propuso elaborar una
lista de mujeres capaces de inspirar a niños y niñas, yo que además había soñado con ser nadadora, no dudé un segundo en incluirla.
ESPEJO
–Mujer, deportista exitosa, fue una adelantada a su época. ¿Qué te inspira su ejemplo?
–¡Tantas cosas! Determinación para arrojarse al río. Disciplina para entrenar todos los días. Paciencia consigo misma y con los tiempos que le marcaba la exigencia del cuerpo. Confianza en sus entrenadores y en sí misma (y en ser capaz de alcanzar una meta). Humildad y valentía en reconocerse parte de un río inmenso domando así sus propios miedos. Templanza en horas difíciles. Creo que la vida de María Digna es un espejo donde pueden reflejarse tanto niños como niñas deportistas, que desean serlo o bien que busquen una respuesta ante un gran desafío.
–¿Cómo ves a la mujer paraguaya y sus luchas?, ¿ves avances?
–Sinceramente los veo y, como no puede ser mejor, los veo exigiendo y ya no callando a las mujeres jóvenes. Hubiera deseado que no existiesen retrocesos, pero también somos testigos de que a veces el derecho que parece conquistado hay que defenderlo. Tenemos, sin embargo, saldos rojos en tanto historia cultural machista que moldea el ser varón y ser mujer en el Paraguay; pero en hasta eso siento que la voz de las jóvenes es –quizás más que fuerte– firme y decidida.
Dejanos tu comentario
“Los muertos no entierran a nadie”: colombiana respondió a periodista uruguayo
La influencer colombiana Sari Gutiérrez, radicada en Paraguay, respondió al periodista uruguayo Valentín Fletcher Ruiz que tachó al país de “muertos”. La colomguaya criticó con firmeza los dichos del comunicador charrúa y defendió el prometedor presente de la Albirroja diciendo: “Los muertos no entierran a nadie”.
“Parce que lindo tener historia, pero que feo tener que vivir de ella, mientras unos se quedan mirando las estrellas del pasado”, empezó diciendo Gutiérrez en un video publicado en su perfil de TikTok.
Luego la colombiana mencionó que la Selección Paraguaya sí tiene en cuenta el tiempo actual. “Otros seguimos jugando en la cancha del presente, y si tanto les molesta que Paraguay festeje este triunfo, como lo festeja, es porque algo está haciendo bien”, dijo Sari en su discurso contra Fletcher.
Te puede interesar: Periodista charrúa volvió a insultar a la Albirroja: “No existe Paraguay”
“Abrazo desde el cementerio futbolístico”
La extranjera hizo mención que los muertos no pueden enterrar, haciendo alusión al marcado 2 a 0 del partido Paraguay versus Uruguay que se disputó este jueves último. “Parce un abrazo enorme y fraterno desde este hermoso cementerio futbolístico, que anoche te hizo llorar”, comentó Sari.
Para cerrar su mensaje, la colombiana destacó la diplomacia del comunicador uruguayo Julio Ríos, conductor del programa “Las Voces Del Fútbol”, quien intentó apaciguar los ánimos tras los dichos de Fletcher.
“El otro periodista, superprofesional y superamable, y superquerido, un abracito y de verdad esa es la gente que vale la pena, la gente que de verdad asume, respeta y disfruta de esta fiesta del fú.tbol, que realmente debería de unirnos a todos”, remató la colombiana.
Reacciones
El mensaje de la colomguaya generó todo tipo de comentarios: "Es como meterle a un barra brava a que sea comentarista“, ”Si un paraguayo decía eso ya nos sancionaron con 5.000 espectadores menos en la cancha", “Muchas gracias Sari por defender a mi querido Paraguay, por eso el único hermano de Paraguay es Colombia” o “A ese periodista pareciera que un paraguayo le hizo feliz a su señora”.
Leé también: Así reaccionó la esposa de Enciso tras verlo llorar por el triunfo de la Albirroja
Dejanos tu comentario
Miguel Prieto recusó a siete fiscales y un juez para trabar audiencia preliminar
El intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto, sigue dilatando el avance de uno de los procesos de la Justicia en su contra, y recusó a 6 agentes fiscales y a una fiscal adjunta, además del juez Humberto Otazú, lo que podría suspender la audiencia preliminar prevista para este miércoles.
Las recusaciones son contra los fiscales Silvio Corbeta, María Verónica Valdez, Jaime Adler Monjes, Néstor Coronel, Luz Guerrero y Marlene González, además de la fiscal adjunta Soledad Machuca, en la acusación por lesión de confianza, administración en provecho propio y asociación criminal, por la compra de alimentos durante la pandemia, informó el periodista de Nación Media, Aldo Insfrán, en el programa “Arriba hoy” del canal GEN y Universo 970 AM/Nación Media.
Te puede interesar: IPS aclara que costeará deudas a proveedoras con fondos propios
Los agentes fiscales recusados son de la Unidad de Delitos Económicos. Esta nueva recusación debe ser estudiada por el propio fiscal general del Estado (FGE), Emiliano Rolón.
Esta nueva recusación evita que se pueda realizar en la fecha la audiencia preliminar ante el juez Humberto Otazú, quien había convocado a Prieto para que el mismo y otros acusados para resolver si la causa es elevada a un juicio oral y público como lo había solicitado el Ministerio Público en su requerimiento conclusivo.
En este caso, la Fiscalía sostiene que con la compra de alimentos en pandemia del covid-19 se generó un perjuicio de G. 350 millones para la Municipalidad de Ciudad del Este. Los representantes legales de Prieto presentaron la recusación contra el juez Humberto Otazú, lo cual refuerza la intención del intendente de no enfrentar la audiencia preliminar.
Leé también: Postergan estudio de proyecto de ley sobre seguro para desempleados
Dejanos tu comentario
Fútbol gaélico llegó al Paraguay
- Por Martín Villagra
- martin.villagra@nacionmedia.com
- Fotos: Gentileza/ Giovani Teixeira
La idea de Paraguay GAA (Asociación Atlética Gaélica en inglés) nació en julio de 2024 cuando Mozz Piokliang, oriundo de Tailandia, se mudó a Asunción. Jugaba fútbol gaélico en su país, donde hay una comunidad irlandesa muy activa. Quería seguir practicando su deporte al llegar al país.
Como no existía ningún equipo en ese momento, Mozz Piokliang decidió comenzar a entrenar por su cuenta junto con su compañero de trabajo, Isaac Jacobs-Gomes, de Estados Unidos.
El fútbol gaélico es una disciplina tradicional de Irlanda que combina aspectos del fútbol, rugby y handbol. Se juega en equipos de 15 jugadores en Irlanda, pero en la mayoría de los países donde está en desarrollo como en América Latina, generalmente se juega 9 contra 9. Los puntos se marcan pasando la pelota por encima del travesaño (como el rugby) o haciendo goles en un arco (como en fútbol). Se caracteriza por su rapidez, dinamismo y muy físico, que cada vez suma jugadores alrededor del mundo.
“Para encontrar interesados, publicaron una invitación en un grupo de extranjeros de Asunción. Fui el primero en sumarme”, recordó a La Nación del Finde Giovani Teixeira, quien hoy ocupa la vicepresidencia de Paraguay GAA, quien luego invitó a su amigo Alberto Martín de España. “A ambos nos encantó este deporte y el grupo empezó a crecer”, añadió.
Invitación
En octubre de ese año, Paraguay GAA recibió su primera invitación internacional para participar en la Copa Almirante Brown, en San Isidro, Argentina, junto a equipos argentinos y uno de Chile. Como todavía no contaban con suficientes jugadores para formar un equipo propio, Mozz, Giovani y Alberto viajaron en auto desde Asunción hasta Buenos Aires para jugar en representación del club San Isidro Gaélico.
“También participaron de un entrenamiento especial en el Hurling Club, invitados por la Embajada de Irlanda, donde entrenaron con el equipo chileno Los Andes y con el equipo argentino GAA, campeón mundial en 2015”, explicó Giovani Teixeira.
Expansión
Tras esa experiencia, el equipo en Asunción fue creciendo rápidamente, sumando no solo extranjeros de diferentes partes del mundo, sino también paraguayos. “Hoy Paraguay GAA cuenta con alrededor de 25 jugadores activos y sigue creciendo cada semana. Más que un equipo, se formó una verdadera familia multicultural, unida por la pasión del deporte, valores de compañerismo y solidaridad”, precisó Teixeira.
Día histórico
Este sábado 24 de mayo de 2025 es un día histórico. En cancha de Luque Rugby Club, ubicado en la avenida Silvio Pettirossi casi Elio Serafini, en las cercanías del Arroyo Itay, en la Compañía Zárate Isla de Luque, se jugará el primer partido oficial de fútbol gaélico en Paraguay. Entre las 12:30 y 17:00 será la confraternidad entre Paraguay GAA y equipo Leyendas de la Cuenca del Plata GAA, rival conformado por jugadores con experiencia en los juegos mundiales.
Planes a futuro
“Paraguay GAA tiene como objetivo conseguir un espacio propio para entrenar y organizar partidos. Desarrollar proyectos para ayudar a la comunidad local a través del deporte, y preparar un equipo que participe en los próximos World Games en 2026”, confirmó Teixeira.
“Velocidad, habilidad y pasión. El fútbol gaélico combina lo mejor del fútbol, rugby y handbol en un solo deporte de origen irlandés. Vení a conocerlo con nosotros en Paraguay”.
ESLOGAN DE PARAGUAY GAA