Durante la incursión en la colonia Gasory, en el departamento de Canindeyú, en el marco del operativo Ignis desarrollado a fin de dar con el paradero de Felipe Santiago Acosta Riveros alias “Macho”, líder de una peligrosa organización criminal, fue detenido su hermano Eusebio Acosta Riveros, pieza clave dentro de la estructura, ya que se desempeñaría como mano derecha de su hermano.

En el mismo procedimiento fueron detenidas otras 8 personas y resultaron abatidos otros 9 involucrados, de los cuales aún se desconocen sus identidades. En prosecución a la misma investigación fue realizado otro allanamiento en la zona de Salto del Guiara donde resultó detenido el ciudadano brasileño Ricardo Luis Picolotto, más conocido bajo el alias de “R7″ quien sería el nexo con la facción criminal brasileña Primer Comando Capital (PCC).

Las investigaciones indican que alias “Macho” y su organización estarían detrás del negocio de tráfico de armas, además de controlar varias pistas clandestinas para el trasporte de droga a los países vecinos, esta organización criminal es investigada por la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) desde diciembre del año pasado y en enero de este año se ordenó la intervención de sus comunicaciones.

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Los detenidos fueron identificados como Eusebio Acosta Riveros, Heriberto Roa Coronel, Hugo Ramón Benítez “alias gordo”, Hugo César González, Alfredo Guzmán Portillo, Cristian Santiago Martínez, Sergio Denis Medina Benítez, Gabriel Fernando De Santos, “alias Gordiño”, Carlos Daniel Castro Wenceslao, y Ricardo Luis Picolotto estos últimos tres de nacionalidad brasileña.

Desde el Ministerio Público también destacaron que esta organización criminal estaría detrás de varios asesinatos de policías paraguayos y brasileños y hechos de violencia en la disputa de estructuras de tráfico de marihuana en el departamento de Canindeyú.

Gracias a la labor de inteligencia se descubrió que trabajaban simulando tácticas de cárteles mexicanos, en especial cuando se trataba del resguardo y trasporte de droga, donde eran utilizados convoyes de vehículos y hombres férreamente armados para custodiar los cargamentos.

Imágenes de circuito cerrado de la zona donde se observa la cantidad de sujetos armados que custodiaban los cargamentos de droga. Foto: Gentileza

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