Ciudad del Este. Agencia Regional.
Una mujer había denunciado que su nieta se había sentido mal en su escuela y fue trasladada al hospital ante una posible intoxicación a causa de alucinógenos en la institución. La dirección de la Escuela Básica número 670 Bernardino Caballero, de Ciudad del Este, emitió este lunes un comunicado desmintiendo tal hecho, en base a un informe médico.
“Según exámenes laboratoriales, no existen indicios de sustancias estupefacientes; sí un elevado pico de glicemia”, señala el escueto comunicado emitido por la institución a través de su cuenta en la red social Facebook y vía WhatsApp. Es con respecto al hecho del jueves 3 de abril a la tarde y denunciado después por la abuela.
El escrito indica: “Nuestra institución profesa valores que buscan formar ciudadanos íntegros para la sociedad (62 años ofreciendo educación pública de calidad) y no permitiremos situaciones que atenten contra la integridad de nuestros educandos”.
El director de la escuela, licenciado Miguel Ángel Goitia, explicó a La Nación/Nación Media que la abuela fue a la institución el día viernes con el resultado del análisis y también fue informado desde la Fiscalía sobre el reporte médico.
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“Fui convocado para declarar ante la unidad del fiscal Osvaldo Zaracho, también debía hacer mi informe a la supervisión y hablar con el equipo de dirección, por lo cual ya quedó para hoy la aclaración”, sostuvo Goitia. El antecedente del caso indica que la abuela había hablado de la existencia de un video como supuesta evidencia; en la misma se observaba a un compañero de su nieta manipulado un polvo color celeste sobre la mesa de la escuela. A raíz de eso fue la sospecha de uso de alucinógenos.
Tal como había explicado el director de la escuela, el polvo es una sustancia azucarada vendida como golosina en el mercado y que es de consumo entre los jóvenes. La alumna de 13 años se había sentido mal durante la ejecución de un proyecto escolar de elaboración de chipa y fue llevada por el director y una profesora, acompañados de la abuela, al pabellón de emergencias del Hospital Regional, donde la dieron de alta horas después tras los estudios de rigor.