Sobre la autopista Silvio Pettirossi de Luque se reportó un accidente que involucró a dos camionetas y una motocicleta, la cual era conducida por un personal de la Fuerza Aérea que se dirigía a la base aérea. Debido al impacto el hombre sufrió la amputación de su pierna.
El herido fue identificado como el suboficial mayor de la Fuerza Aérea Cándido Insfrán, de 48 años. El hombre se desplazaba sobre su motocicleta cuando abruptamente fue embestido por una camioneta de la marca Isuzu y terminó impactando contra una segunda camioneta de la marca Toyota.
Debido al fuerte impacto el personal militar sufrió el desprendimiento de la pierna izquierda y fue derivado rápidamente al Hospital Militar para ser asistido, donde procedieron a la amputación del miembro debido al grave daño sufrido. Actualmente se encuentra internado con pronóstico reservado.
Podés leer: Meningitis: enfermedad que puede significar una emergencia médica
Los demás involucrados fueron identificados como Juan Gabriel Cáceres Agüero (28), quien se encontraba al mando de la camioneta de la marca Isuzu, de color blanco, y Elio Rubén Valle Freding (58), quien conducía la camioneta de la marca Toyota modelo Hilux.
Ambos conductores fueron trasladados hasta la base de la Patrulla Caminera, donde se les realizó la prueba de alcotest, la cual en ambos casos dio resultado negativo. Los intervinientes barajan la hipótesis de que la causa del accidente habría sido la pista mojada y la alta velocidad.
Los vehículos involucrados fueron enviados a la Comisaría Tercera de Luque y todo lo actuado por los intervinientes fue notificado al fiscal de turno de la unidad penal n.° 9 de Luque, Augusto Ledezma, quien ordenó que los conductores fueran puestos en libre circulación mientras avanza la investigación.
Lea también: Tiempo inestable: lluvias persistirán este jueves
Dejanos tu comentario
Choque de buque mexicano contra puente dejó dos muertos
- Nueva York, Estados Unidos. AFP.
Las autoridades federales de Estados Unidos abrieron este domingo una investigación por el choque del buque escuela mexicano Cuauhtémoc contra el icónico puente de Brooklyn de Nueva York, que dejó un saldo de dos muertos y una veintena de heridos. La parte superior de los mástiles del navío, de 48,2 metros de altura, impactó contra el puente que une Manhattan y Brooklyn ante la mirada de los transeúntes.
Algunos de los miembros de la tripulación del velero se encontraban sobre las vergas y las jarcias en el momento del impacto, como se ve en los muchos videos compartidos en redes sociales por testigos que caminaban por las orillas del East River. El alcalde de Nueva York, Eric Adams, dijo que el buque escuela escuela había perdido potencia antes de impactar contra el puente.
Como consecuencia del choque, “de las 277 personas que iban a bordo, 19 habían resultado heridas, dos de ellas en estado crítico, mientras que otras dos desgraciadamente murieron a consecuencia de sus heridas”, dijo Adams.
La Agencia de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (NTSB) anunció el domingo en X que había desplegado un equipo de expertos para investigar.
El buque, cuya próxima etapa iba a ser Islandia, en vez de dirigirse hacia al sur, hacia mar abierta, cruzó prácticamente en línea recta el río antes de impactar sus mástiles contra el puente al lado de uno de los pilares.
Aldo Ordóñez, hermano de una cadete de la marina mexicana que iba a bordo, declaró a la AFP que la tripulación “no sabe qué pasó”.
“Fue muy espectacular, no tuvieron tiempo de reaccionar”, dijo el domingo por la mañana a su llegada a Nueva York procedente de Ciudad de México.
Su hermana, de 24 años, que se iba a graduar en esta primera travesía a bordo del Cuauhtémoc, sufrió heridas leves a causa del siniestro, explicó Ordóñez.
El barco había iniciado un viaje de siete meses el pasado 6 de abril desde su base de operaciones en el balneario de Acapulco, que iba a concluir en diciembre.
Lea más: Con crítica a los excesos del capitalismo, León XIV inicia su pontificado
“Lamentable accidente
Estaba atracado en medio de fuentes medidas de seguridad en un muelle cercano al puente de Manhattan, no muy lejos del de Brooklyn, a donde se desplazó el embajador de México en Estados Unidos el domingo por la mañana, según observó una periodista de la AFP.
Dos de sus mástiles están doblados y el del centro, cercenado. El velaje estaba recogido, aunque se podían apreciar parte del tejido roto en algunas partes.
La policía obligó a la prensa y a los numerosos curiosos a replegarse por el fuerte viento reinante, por razones de seguridad.
Algunos de los heridos, entre ellos uno con una venda alrededor de la cabeza, regresaron temprano en la mañana al barco, observó también la AFP.
Según Ordóñez, toda la tripulación iba a ser trasladada este mismo domingo a México en un vuelo comercial.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, se declaró “muy apenada” por el “lamentable accidente”, según escribió en X.
El barco zarpó del muelle del sur de Manhattan el sábado, tras recibir la visita durante los últimos días de centenares de curiosos, muy iluminado y engalanado con banderas mexicanas y las de otros países visitados.
Lea también: Zelenski habló con Vance en Roma sobre próxima llamada Trump-Putin
“Había pánico”, dijo a la AFP Nick Corso, un residente de Brooklyn de 23 años que se encontraba cerca del agua.
Estaba a punto de tomar una fotografía, pero cuando se dio cuenta de lo que estaba sucediendo cambió de idea y filmó un video del suceso.
“Había muchos gritos, algunos marineros colgando de los mástiles”, dijo. “No vi a nadie caer al agua, pero sí a mucha gente arriba. ¡La gente corrió hacia atrás y gritaba!”, describió. Según el Departamento de Transportes de Nueva York, “no se han encontrado daños estructurales en el puente de Brooklyn”.
Dejanos tu comentario
Piden justicia: tras cuarta suspensión del juicio contra padre abusador, fijaron fecha para el 19 de mayo
Este domingo, una mujer desconsolada denunció que la semana pasada se suspendió por cuarta vez el juicio por abuso sexual en niños, del cual fue víctima su hija de 10 años en el 2020 en Luque. El presunto abusador sería su propio padre, y sus abogados solicitaron una nueva fecha, que se fijó para el 19 de mayo.
El caso fue denunciado hace cinco años y, hasta la fecha, la niña no ha tenido justicia, mientras el presunto autor, su propio padre, sigue libre e incluso puede trabajar. La madre de la menor denunció que el hombre estuvo detenido en la comisaría por unos días y que debía pasar a una penitenciaría, pero luego fue liberado.
“En 2021 supuestamente debía pasar a Tacumbú, pero nunca pasó. Me di cuenta de que estaba libre y fui a denunciarlo a la Fiscalía, pero me dijeron que estaba de reposo por covid. Después, una familia subió a sus redes sociales que estaban compartiendo en un cumpleaños”, relató la madre, en entrevista con La Nación/Nación Media.
Expresó que hasta la fecha no ve avances en las investigaciones y que, lamentablemente, el hombre sigue libre. “A cinco años de la denuncia, con muchas lágrimas, logramos cambiar de fiscal, quien logró fecha para el juicio oral y público; pero en el juzgado de Luque le dan demasiados privilegios y logró la cuarta suspensión”, confirmó.
Leé también: Jóvenes se enfrentaron a la salida de discoteca en Villa Morra
Chicanas
Afirmó que siempre alega estar indispuesto, que no tiene abogados o que los abogados recusan a los jueces, entre otros. “Tiene un equipo de cinco abogados encabezado por Liz Martínez y lograron la cuarta suspensión. Ahora se fijó una nueva fecha para mañana lunes, y esperamos que no presente nuevas chicanas para no declarar”, sentenció.
Aseguró que todo el sistema estuvo mal en este tiempo y que su hija ingresó a la cámara Gesell tres años después de lo ocurrido. “Hoy tiene 15 años y aún no tienen justicia por lo que le hizo su papá; esto es muy triste y doloroso para mí. Nunca llamé a la prensa porque no quería exponer a mi hija, pero tengo que denunciar para que me hagan caso”, refirió.
“Pido justicia por mi hija”
La mujer indicó que tienen a tres adolescentes a quienes mantener y que su hija le pidió que no se haga publica esta situación, pero que ante los hechos de corrupción se vio en la necesidad de hablar para que la justicia se mueva a favor de su niña. “El único pecado mio es no tener dinero para pagar abogado desde el principio. Imagínate mi hija fue abusada en varias ocasiones y hasta hoy día ese señor no piso la cárcel”, manifestó.
Aclaró que duele mucho la situación por la que está pasando y que quiere que se haga justicia por su hija. “Hoy, a cinco años, seguimos llorando y pidiendo justicia. Duele muchísimo; jamás en mi vida imaginé pasar por estas cosas, que la persona que la debía proteger haya sido quien abusó de mi hija. Gracias a Dios, ella recibió contención”, sentenció.
Dejanos tu comentario
Reportan choque y vuelco de vehículo en la avenida Mariscal López
Este domingo, se reportó un choque y vuelco de vehículo sobre la avenida Mariscal López de la ciudad de Asunción, donde se vieron involucrados dos automóviles, pero no se reportaron víctimas fatales. Uno de ellos era guiado por un conductor de plataformas, cuyo pasajero se resistió a ser atendido por los bomberos y a dar sus datos personales para su identificación.
Según el reporte policial, el hecho se registró esta mañana sobre la avenida Mariscal López en su intercepción Dimas Motta, donde chocaron dos automóviles y uno de ellos volcó. Testigos confirmaron que uno de los rodados pasó la luz roja del semáforo e impactó contra el conductor de plataformas, que tras el choque volcó.
“Encontramos un vehículo totalmente volcado, en el interior estaba el conductor y un pasaje, este último salió por su cuenta, sería de nacionalidad extranjera que se negó a ser asistido y actuó en forma muy violenta con los voluntarios que intentaron ayudarlo”, detalló en teniente Emilio Olmedo, en la 1080 AM.
Expresó que el conductor presentó contusiones y golpes varios, fue derivado hasta el Hospital de Trauma para observación. “Se cruzó con otro vehículo lo que provocó el vuelco. El conductor contaba con cinturón de seguridad por lo que pasó a mayores”, puntualizó.
El conductor que habría pasado la luz roja se dio a la fuga tras el impacto, pero en el lugar quedó su chapa lo que permitirá identificarlo en las próximas horas. “Se trataría de un automóvil de color negro de la marca BMW, otros datos no tenemos. Con la chapa lograremos dar con el propietario, pero debemos corroborar si pertenece al conductor”, manifestó el oficial Fernando Franco.
Dejanos tu comentario
Arturo Bray, un paraguayo de grandes batallas
- Jimmi Peralta
- Fotos: Gentileza
Arturo Venancio Bray Riquelme nació en Asunción, fue hijo del inmigrante inglés Sydney Ernest Bray y de la paraguaya Rita Riquelme. Como se lee en su historia y en la forma firme de su prosa, su carácter, talento y la vida misma lo pusieron como partícipe de hazañas y destacado en sus dos ámbitos de acción: las armas y las letras.
“El juicio de la posteridad me tiene sin mayor cuidado, una vez hundido en las impenetrables sombras del más allá; (…) como estas ‘Memorias’ no se publicarán –si se publican– si no después de mi muerte, a ninguno o a muy contados de mis contemporáneos podré herir en carne propia con flechas disparadas desde la impunidad”, escribe en la primera parte de su “Armas y letras” el coronel Arturo Bray, un militar paraguayo que fue condecorado tres veces por su participación en la Primera Guerra Mundial y con un rol militar importante en la guerra del Chaco.
En aquel texto, sus memorias, cerraba el relatorio oficial de su vida enfundando el arma que desenfundó al dejar atrás su vida castrense: la pluma.
Bray nació en Asunción el 1 de abril de 1898 y falleció en la capital paraguaya el 2 de julio de 1974.
“Bray fue parte de la primera promoción de bachilleres del Colegio San José de Asunción en el año 1913. Luego fue becado a Europa. Al término del primer año de la carrera de medicina, se iniciaron las acciones militares de la Primera Guerra Mundial. Al tener padre inglés y hallándose en edad militar, es considerado un ciudadano inglés, siendo incorporado por ello al Ejército Expedicionario Británico en Francia”, explica el investigador y docente universitario Eduardo Ortiz Mereles.
Por su participación en la Primera Guerra Mundial fue condecorado con la medalla de guerra (Inglaterra); la medalla de la victoria (Inglaterra) y con la cruz de guerra (Francia), todas por su participación durante la Primera Guerra Mundial.
“El 15 de noviembre de 1915 en Hide Park, Londres, es incorporado como soldado raso. Asciende a teniente segundo de infantería el 21 de agosto de 1917, a teniente primero de infantería el 12 de febrero de 1919. Luego participa en los batallones 19.° y 17.° del King’s Royal Rifles y en la 117.ª Brigada de la 3.ª División de Infantería Inglesa”, explica el investigador.
Según recuerda el historiador, el escritor Carlos R. Centurión afirma que Bray desde muy niño profesó un amor hacia las armas y la carrera militar, lo que explicaría cómo su incursión en la vida castrense terminaría marcando gran parte de su vida profesional.
EL REGRESO
En sus memorias se refiere al periodo de esa posguerra en el capítulo “De regreso al Paraguay (1919-1921)”, con los apartados titulados “Retorno al solar guaraní”, “Nuestro ejército en 1920”, “El mando superior”, “Organización militar”, entre otros.
Luego de su regreso al país, por el grado militar obtenido en la guerra, los conflictos políticos revolucionarios de comienzos de la década del 20 lo pusieron en la coordinación de la defensa de las fuerzas gubernistas.
Entre 1924 y 1928 fue edecán de Eligio Ayala, secretario de la Adquisición de Armas en Europa y director de la Escuela Militar hasta el estallido de la guerra.
Iniciado el conflicto con Bolivia, Bray comandó el Regimiento 6 de Infantería Boquerón. “Se le atribuye haber recibido la rendición del fortín boliviano del mismo nombre de manos de su jefe, el famoso Cnel. Manuel Marzana, y llegó a comandar la IV Región de Infantería en campaña, pero las desavenencias con el comandante en jefe, José Félix Estigarribia, a raíz del mutuo encono personal que se profesaban, hicieron que luego de los sucesos de Pirizal en 1933, el comandante Bray fuera procesado y separado de sus funciones”, según refiere el historiador Eduardo Nakayama.
UN PARÉNTESIS
La guerra del Chaco fue solo un paréntesis en las desavenencias políticas a nivel interno en nuestro país, por lo que apenas terminada la contienda, al año siguiente el coronel Rafael Franco ya había asumido la dirección del Poder Ejecutivo tras un golpe de Estado. El presidente Eusebio Ayala y el general Estigarribia fueron expulsados del país y a Bray le tocó la prisión militar de Peña Hermosa.
Si bien formó parte de gobiernos liberales, su formación ideológica no necesariamente fue orgánica con aquellos.
“Varias veces tuvo enfrentamientos de tinte político con gente de esa facción política (mismo con Estigarribia, quien fuera su comandante superior en el Chaco y que luego le nombrara como ministro plenipotenciario en el exterior durante su presidencia), al igual que con los partidarios del Partido Colorado. La cuestión radica en que él fue parte del periodo conocido como el de la ‘época liberal’ y por ello es considerado como de ese partido, pero él solo estaba cumpliendo su gestión política durante el gobierno liberal”, refiere Ortiz Mereles.
Luego de su estadía en prisión, volvería a ejercer la función pública. En palabras del propio Bray se narra su arribo como embajador ante España de la siguiente manera: “En los primeros días del mes de abril de 1939, el presidente Paiva me hizo ofrecer en Buenos Aires, por intermedio del doctor Higinio Arbo, que seguía como ministro del Paraguay en la Argentina, una plenipotencia en Europa. A pesar de ser refractario a los ‘dorados destierros’, acepté el cargo ante reiteradas instancias del ministro de Relaciones Exteriores, alegando este que dada la existencia de problemas pendientes con el gobierno del general Franco, a raíz de la actuación nada inobjetable de nuestro encargado de negocios, Jesús Angulo Jovellanos, durante la guerra civil española, un militar estaría en mejores condiciones, dado el nuevo régimen instaurado en España, que un civil para resolver aquellos problemas. Por otra parte, con fecha 4 de junio, el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas me cursaba el siguiente telegrama: ‘Nombre FF. AA. de la Nación exprésole confianza del ejército y armada nacionales para cumplir su misión como ministro en España’”.
LABOR LITERARIA
La paz le había sido esquiva tanto a Bray como al Paraguay en lo que iba del siglo, pues revoluciones y guerras habían trazado una línea inacabable. En 1941, en el gobierno de otro militar, Higinio Morínigo, Bray decidió dejar atrás su vida pública y emigró a la Argentina, tierra que llevaba ya mucho tiempo recogiendo a compatriotas.
Allí se vuelca a profundizar su relación con las letras y a abordar su veta literaria, lo que le vale el reconocimiento inmediato por lograr traducciones inéditas y, posteriormente, por lo importante de su trabajo.
“Es muy posible que el talento como escritor de Bray haya estado presente entre sus capacidades más altas y prueba de ello es que siempre se destacó en el uso de la pluma. Según las crónicas, y teniendo en cuenta su activa participación al servicio de las Fuerzas Armadas desde muy joven, fue después de retirado del servicio militar activo que logra destacarse en letras, ya en su periodo como destacado funcionario no militar al servicio del gobierno nacional. Pero sin dudas su mayor expresión como escritor fue después de su retorno del exilio a Paraguay, en donde se destacó en su labor literaria y de letras”, explica el investigador Ortiz Mereles.
Entre sus publicaciones se citan “Hombres y épocas del Paraguay”, con dos ediciones en 1943; “La España del brazo en alto”, sobre la España franquista (1943); “Los primeros diez mil”, libro inédito referente a la guerra del Chaco; traducciones como “Satanás con sombrero de copa”, “Los generales alemanes frente a Hitler”, “La hembra, cortesana de Bizancio” y “Así es el presidente Truman”, esta última de la colección Grandes Novelas y Biografías, realizada en conjunto con Walter Hehmeyer.
Uno de sus trabajos más destacados fue “Solano López, caballero de la gloria y el infortunio”, además del ya citado “Armas y letras”, un libro de memorias de publicación póstuma datado en 1967.
Durante su exilio en la Argentina, Bray desarrolla su rol de escritor, conjuntamente con los de columnista, traductor y periodista. Entre sus textos traducidos más destacados está la primera edición en castellano de “1984”, de George Orwell.
“Se podría considerar que los ensayos de Bray fueron continuación de la conocida como generación del 900, cuyos miembros más representativos fueron Juan E. O’Leary, Cecilio Báez, Manuel Domínguez, Blas Garay, Fulgencio R. Moreno, entre otros.
Luego de 1915 surgen otros autores que podrían ser considerados una continuación y reinterpretación de los autores de 1900 y son Natalicio González, Pablo Max Insfrán, Justo Pastor Benítez, entre quienes aparece la figura de Arturo Bray.
UN NUEVO RETORNO
Ya afianzado el gobierno militar de Alfredo Stroessner, en 1969, Bray, quien si bien estuvo casado con Mariela Jacquet, no tuvo hijos, vuelve al país para seguir dedicándose a las letras, sin ninguna participación política o injerencia castrense registrada.
“Consideramos que él vuelve al Paraguay ya por estar definitivamente alejado de los quehaceres militares y políticos que alguna vez fueron parte de su vida. A su vez, la política en ese momento ya tenía a otros protagonistas y el poder ya estaba siendo manejado por el Partido Colorado. Creemos que él vuelve por el natural paso del tiempo y porque la coyuntura en la época de su retorno ya era otra. Es por ello que consideramos que regresó para vivir sus últimos días en Paraguay”, refiere el historiador.