• POR JOEL SANDINO, GEN

Óscar Esteban Osvaldo Mongelós Morínigo, más conocido como don Pinocho, es un ejemplo de disciplina y perseverancia porque, a sus 92 años, repre­sentó a Paraguay en el Cam­peonato Mundial de Remo en Pista Cubierta (WRICH), mejor conocido como “remo bajo techo”, en la categoría M-90, donde quedó como finalista y se alzó con la meda­lla de plata de la competencia, con lo que dejó en alto a la ban­dera tricolor. Don Mongelós superó su propio límite y pudo lograr hacer 2.000 metros en remo bajo techo en un tiempo récord de 15 minutos. Del evento internacional de remo, que se realizó de manera vir­tual este año a raíz de la pan­demia del covid-19, participan 935 finalistas de 63 países.

“Estoy de primera porque tengo mucha gente que me apoya, me orienta y que me sigue por lo que no puedo que­jarme. Es una suerte de coinci­dencia porque yo nunca conocí esta máquina –la de remo bajo techo– y cuando vino a mi casa empecé a practicar y decidí presentarme en esta compe­tencia”, comentó don Monge­lós, minutos antes de iniciarse la competencia mundial.

El vicecampeón mundialista es de profesión contador, pero ya jubilado, empezó a practicar el remo bajo techo desde ini­cios del 2020, debido a que con­trajo la enfermedad del dengue lo que le provocó bajas en sus defensas y languidecimiento de sus músculos. El remo en pista cubierta le ayudó a mejo­rar su salud con la actividad física y recreativa que reali­zaba todos los días encima de la máquina de remo. “Dale ‘Lelo’, fuerza ‘Lelo’”, era la voz uní­sona de toda la familia Mon­gelós para apoyarlo durante los minutos claves de la com­petencia. Don Pinocho Mon­gelós tiene 12 hijos, 33 nietos y 8 bisnietos, quienes formaron parte, junto a todo Paraguay de su hinchada.