Las autoridades de Bélgica han confirmado que el puerto de Amberes es uno de los principales puntos de entrada de drogas a Europa de los principales cárteles sudamericanos, donde se ha logrado interceptar en 2023 un volumen récord de cocaína, que alcanzó las 116 toneladas. Mencionan, además, que lo incautado es apenas un 10 % de la droga que llega a Europa, los cuales provienen principalmente de Ecuador, Colombia y Panamá.
En comunicación con el programa Show de Noticias, que se emite por Canal GEN, el corresponsal de Nación Media en Europa, Christian Martin, quien reside en Inglaterra, comentó que las autoridades europeas han señalado que en el puerto de Amberes es donde se da el mayor tráfico de cocaína. Se refirió a las últimas incautaciones y comparó las incautaciones con respecto al año anterior, indicando que ha sido un año de récord absoluto.
“Ellos estiman que solo llegan a incautar un 10 % de la cocaína que llega a toda Europa desde Sudamérica. El origen de estas sustancias, informan, que proceden, en primer lugar, de Ecuador, seguido de Panamá y Colombia. Al respecto, el ministro de Economía de Bélgica, Vincent Van Peteghem, confirma lo que es los 160 kilómetros que tiene en total todos los sectores de desembarque del puerto Amberes, llegan una cantidad enorme de droga, de los cuales ellos estiman que solamente logran incautar el 10 %”, comentó Martin.
Mencionó que en todas las grandes ciudades de Bélgica, ya sea Bruselas, Brujas y la misma Amberes, entre otras, existe una guerra civil entre pandillas que intentan monopolizar el comercio de esta cocaína que procede de Sudamérica.
Origen de la droga
El corresponsal de Nación Media indicó que, si bien no se especifican los puertos de salida de Sudamérica, se sabe que los países de origen de la droga son Ecuador y Colombia en América del Sur; así como Panamá de Centroamérica. “Entendemos que el 30 % de la droga viene de puertos ecuatorianos, un 20 % a 25 % de puertos colombianos y el resto de diferentes puertos en Sudamérica y América Latina. Realmente es una cantidad enorme que va subiendo año a año”, acotó.
Martín comentó que se utilizan las cajas de frutas y verduras, que son los medios favoritos, para transportar la droga. Indicó que las 116 toneladas estaban escondidas en cajas de banana. Mencionó que una vez que logran traspasar los controles en los puertos de Europa, luego ya tienen libre tránsito por tierra, lo que ya hace casi imposible realizar los controles, ante la inmensa cantidad de tráfico comercial que existe en todo el continente.
Bélgica pide ayuda
“Ellos piensan que muchos de los más exhaustivos controles que se hacen en Róterdam, Países Bajos (Holanda), este tráfico ha cambiado por destino al Puerto de Amberes, por eso, las autoridades belgas piden ayuda a la Unión Europea para llevar controles más exhaustivos, porque llegan los conteiner y se les hace imposible revisar caja por caja y controlar absolutamente todo”, explicó.
Finalmente, Martin indicó que en Bélgica tuvo que intervenir el Ministro de Economía, Van Peteghem, quien mencionó que necesitan de presupuesto, porque por el momento es una guerra injusta, los narcotraficantes tienen muchísimo más presupuesto y apoyo logístico que las propias autoridades de ese país que intentan contrarrestar este tráfico.
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