Paraguay está redefiniendo su estrategia energética en un contexto global desafiante. El viceministro de Minas y Energía del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), Mauricio Bejarano, contó sobre los avances que se observan en la regulación de energías renovables, la apuesta por el gas natural como respaldo firme y el impulso a proyectos de cogeneración.
En el programa “Fuego cruzado”, emitido por GEN/Nación Media, Bejarano explicó por qué Paraguay no puede darse el lujo de perder su ventaja energética y adelantó las claves de lo que será la primera gran licitación de potencia nueva en años.
“Nuestra estrategia está enfocada en defender una ventaja clave, que Paraguay es uno de los pocos países del mundo que hoy tiene excedente de energía. Eso no podemos perderlo. Es una condición estratégica que nos guía, incluso en la agenda ambiental, para que el país siga teniendo control sobre su recurso energético”, expresó en GEN.
Precisó que uno de los pasos claves que el gobierno está impulsando es la modificación de la última ley de energía renovable y luego, su modificación. Uno de los objetivos es lanzar la primera licitación de generación de energía 100 a 140 megavatios para que empresas privadas puedan operar y vender energía a la Administración Nacional de Electricidad (Ande).
Reiteró que esto implica un cambio en las reglas del juego con urgencia, porque nuestro país está creciendo y necesita sumar al menos 400 megavatios por año para mantenerse al día y evitar escasez a futuro. “Estamos también a unos 60 días de terminar la reglamentación de la ley para pequeñas fuentes de generación, donde cada nuevo megavatio sumado es importante. Es clave mejorar la disponibilidad de energía firme, ya que no toda la potencia instalada está disponible al mismo tiempo por mantenimientos y otros factores”, dijo.
Transición
Acerca de la transición energética, expuso que están trabajando arduamente en el proyecto del gasoducto oceánico que llevaría gas natural a Paraguay a través de Brasil o Argentina. Este es un paso clave para dejar atrás el combustible y el carbón, y utilizar más la energía renovable. Bejarano explicó que el gas natural tiene muchas ventajas, entre ellas, producir energía de forma continua y controlable, por eso se lo conoce como “energía firme”.
“El gas natural va a ser el gran respaldo para las fuentes alternativas como la solar o la eólica. Lo demuestra el reciente apagón en la península ibérica, un llamado de atención al mundo sobre la necesidad de pensar no solo en generación, sino también en demanda”, refirió.