La Gobernación de Canindeyú, al igual que las otras gobernaciones, recibió un fondo en el marco de la emergencia sanitaria para destinarlo en un 80% a la reactivación económica y un 20% al sector salud. Este fondo de G. 6.300 millones sirvió para llevar sistemas de agua potable y empedrar numerosas calles del departamento.
En una publicación periodística aseguraron que parte de este fondo se distribuyó de forma apresurada e insinuaban un uso discrecional de dichos recursos en Canindeyú; sin embargo, el gobernador César Ramírez señaló que este artículo tenía más bien un tinte político, puesto que él abandonó el oficialismo.
A través de documentos, el gobernador Ramírez detalló el uso que le dio a dichos recursos; además, puso a disposición de la prensa y la ciudadanía la ubicación de todas las obras realizadas con los fondos de reactivación, de modo que actúen de contralor y verifiquen la calidad de las mismas.
Distritos como Curuguaty, La Paloma del Espíritu Santo, Salto del Guairá y Francisco Caballero Álvarez fueron beneficiados con la realización de empedrados, además que en varias comunidades de los mencionados distritos se construyeron sistemas de agua potable.
El gobernador explicó que los fondos fueron recibidos el 28 de diciembre del 2020 y existía una obligación de ejecutarlos en su totalidad a fines de febrero del 2021; de lo contrario, dichos recursos pasarían a otro rubro y ya no se podría destinar a la reactivación económica mediante la generación de empleo en el departamento.
A su vez, detalló que la comisión Pro Desarrollo del Norte fue la que presentó el proyecto y la que cerró el contrato con las constructoras, motivo por el que le realizaron la transferencia de G. 2.550 millones para el pago de las obras, desembolsos que fueron concretándose a medida que avanzaban las obras.
“En enero se firmaron los contratos con las diferentes empresas y el primer desembolso a la comisión se hizo en febrero. La comisión iba pagando de acuerdo al avance de las obras”, explicó Ramírez.
Así también, el administrador de la Gobernación, Carlos Martínez, indicó que este mecanismo de ejecución fue acordado con todas las gobernaciones dado que un llamado a licitación tarda entre 4 y 5 meses, y ellos debían ejecutar el dinero en la brevedad posible.
El gobernador desmintió que exista un favoritismo hacia la comisión Pro Desarrollo del Norte y aseguró que de hecho la publicación periodística, que asegura que hubo una repartija de los fondos, es tendenciosa y con fines políticos para posicionar al vicepresidente, candidato que no está despegando, según encuestas.
“Sabíamos que abandonar el oficialismo iba a tener consecuencias, estamos para afrontar esa situación, no nos van a amilanar”, afirmó Ramírez.
A su vez, mencionó que sabía que se tirarían algunas “bombitas” respecto a la gobernación, esto debido a que el equipo político de Hugo Velázquez mantuvo hace poco una reunión con sus adherentes en el departamento de Canindeyú.
César Ramírez aseguró que tiene una aceptación del 80% del departamento de Canindeyú y que eso los motiva a seguir trabajando por el bien de su comunidad.