El presidente del Congreso, Silvio Ovelar, anunció la suspensión de la licitación que había sido convocada para ampliar la sede legislativa por valor de G. 3.600 millones. Además, el senador dispuso ayer martes el desmantelamiento de las oficinas que habían sido instaladas en la planta baja del Parlamento, cerca de la zona del comedor, informó la periodista de Nación Media Francisca Pereira.
La licitación para ampliar el Congreso había sido convocada debido a “la necesidad de reorganización y optimización de espacios físicos para el recinto parlamentario”, aunque para lograr este cometido se adoptará otra medida.
La orden del titular del Legislativo es que a partir de hoy se proceda a despejar el sector donde se encuentran estos precarios escritorios, montados a partir del mes de julio pasado, cuando asumieron los nuevos senadores y diputados.
Ovelar argumentó que, en caso de un eventual incendio, esto podría ser una bomba de tiempo, sobre todo porque dichas “oficinas” ocupan espacio en los pasillos y pueden obstaculizar la rápida evacuación de funcionarios y legisladores.