¿Cómo es el lugar donde pasás la mayor parte del día? Te ponemos al día sobre los “ambientes saludables de trabajo” de acuerdo a la OMS y como apostar por ellos, una tendencia que crece en Asunción.
Texto: Jazmín Gómez Fleitas
“Varios estudios confirman que la calidad del ambiente físico y la distribución del espacio laboral —en conjunción con otros factores— influyen en la productividad, motivación y compromiso de los trabajadores. La calidad del ambiente físico es una de las avenidas para desarrollar entornos laborales saludables según la OMS”, explica Mercedes Argaña, Máster en Psicología Laboral.
Quizás cuando pensamos en ambientes ideales de trabajo lo primero que nos viene a la mente son las oficinas de Google o Pixar, porque nos deslumbran con la creatividad del diseño y el uso inteligente del espacio, pero, ¿qué hace que sus oficinas sean tan atractivas?
“Las grandes tecnológicas marcaron tendencia en ese sentido. Fueron pioneras en demostrar que la productividad no se trata de estar enfocado 100% en tu oficina cerrada sino que se es más productivo en ambientes distendidos”, puntualiza la arquitecta Verónica García de Fusión Equipamiento.
Siguiendo esas características, sería un espacio de trabajo pensado de manera estratégica, es decir, teniendo en cuenta cuáles son las actividades principales, cómo trabaja la empresa y a partir de allí, desarrollar la distribución de los muebles, el ingreso de la luz natural, el uso de sillas ergonómicas, el diseño de los espacios compartidos, etc.
Al respecto, García nos explica que Fusion Equipamientos viene trabajando hace unos años en el desarrollo de proyectos corporativos de oficinas acorde a la actividad particular del día a día, la cultura del trabajo y el espacio que se disponga. “Toda empresa quiere ser productiva y tener un buen clima. Ambas van de la mano, porque si el clima es bueno, la gente va ser productiva”, afirma.
Espacios abiertos
Esta tendencia conocida como oficinas millennials, ya que se potenció desde empresas de innovación de jóvenes pertenecientes a esa generación, en realidad también puede aplicarse a cualquier oficina donde convivan varias generaciones además de la millennial.
Mercedes expone que los jóvenes nacidos entre 1980 y 2005, cuyas edades fluctúan entre los 20 y los 35 años (la millennial), es la población laboral mayoritaria en Paraguay actualmente. Esta generación fue criada en democracia, expuesta cotidianamente al mundo a través de internet, a las redes sociales, a los smartphones, recibiendo tal cantidad de estímulos diarios que es mucho mayor que generacions anteriores.
“Como consecuencia de este comportamiento generacional los millennials valoran la participación, la colaboración, la flexibilidad, y en consecuencia, los lugares de trabajo cuya cultura sea más bien horizontal, abierta a reconocer las distintas voces y sobre todo abierta a la diversidad. En este contexto, el verdadero desafío de las organizaciones es recrear su cultura para favorecer las formas de trabajo más horizontales, que logren integrar los saberes de las distintas generaciones, juntando experiencia con los ojos frescos de los jóvenes del milenio, mucho se puede hacer desde la arquitectura, el mobiliario, pero sobre todo desde los modelos de gestión, para atender y potenciar los valores de la época: conectividad, valoración del conocimiento, flexibilidad, colaboración y productividad sin renunciar a la calidad de vida de cada uno” explica.
Y García da fe de ello: “Existen muchos casos donde nosotros participamos del equipamiento de empresas que pasaron de tener sus oficinas en muy malas condiciones y en muy malas instalaciones, a tener oficinas bien planificadas en base a sus actividades y su forma de trabajo. Y los resultados son excepcionales. Tenemos muchos casos de éxito de productividad en ese sentido”.
Esta idea de espacios abiertos u Open Space (en inglés) ya lleva bastante tiempo desarrollándose a la par que los nuevos modelos de gestión organizacional, más democráticos, horizontales y colaborativos.
“La idea que promueve este concepto es reducir la distancia jerárquica entre los miembros de una organización, promover relaciones más horizontales y favorecer el trabajo en equipo”, aclara Argaña.
Es debido a eso que el uso inteligente del espacio que promueva todo ello, es siempre un desafío. “Se necesitan momentos de encuentros para crear colectivamente, se necesita momentos de privacidad para cerrar acuerdos, resolver conflictos, atender problemas, etc, y se necesita momentos de esparcimiento y encuentro distendido. Combinar espacios y mobiliario que permitan responder a estas distintas necesidades es la tarea que, si se logra, mejora substancialmente la percepción de la calidad del ambiente físico de trabajo y del clima laboral en general” expone Argaña.
Y es que pueden haber espacios compartidos de trabajo con las mesas de trabajo juntas, sin paredes que separen las oficinas, pero también se necesitan oficinas de reuniones (cerradas) si hay que firmar documentos (estudio juridico), resolver conflictos, realizar reuniones de equipo, etc. El diseño adecuado de una oficina que cubra todas las necesidades laborales, debe ser pensado estratégicamente.
“Lo que sí es transversal a todo es estar en un ambiente con vistas al exterior, con posibilidad de aireación e iluminación natural (esto es importante para estar al tanto del paso del tiempo y de las estaciones), y una climatización adecuada (tanto en temperatura como en renovación del aire), al igual que una iluminación artificial adecuada. Sobre todo es importante entender que el espacio laboral es una actividad cambiante, con lo cual la flexibilidad de los espacios se vuelve importante, así como considerar desde el vamos en el diseño de los espacios arquitectónicos, las instalaciones y la elección de materiales, ese concepto de flexibilidad constante” argumenta Mercedes.
Gracias a la interacción de generaciones muchos de los aspectos positivos de cada una se contagian a las otras y ayuda al crecimiento profesional, al aprendizaje. Argaña destaca: “Un buen lugar para trabajar, que responde a las necesidades requeridas por la tarea, que cuida los aspectos de calidad y seguridad ambiental, que favorece el encuentro con los compañeros de trabajo, gusta a cualquier trabajador, independientemente de su edad”.