Texto: Luis Ríos Florentín
@nosoyunvampire
A finales de los años 90 y principios de los 2000 hubo un espacio en la música donde una serie de estilos muy opuestos, compuestos de sonidos oscuros y modernos, podían hacer fiestas sin que nadie se sintiese incómodo. De ese momento ya pasaron 20 años y muchos de los que asistíamos a esas estas ya estamos grandes, con poco cabello en la cabeza, pero mucho en otras partes del cuerpo.
Como fruto de esas fiestas estas nace Hybrid Theory, el disco debut de Linkin Park lanzado el 24 de octubre del año 2000. El encargado de levantar la bandera de la segunda oleada del Nu metal presenta una combinación homogénea de heavy metal, rock alternativo, grunge y rap. Un reflejo de esas fiestas en donde varios sonidos podían interactuar con total normalidad. Aunque suene complejo, era una mezcla simple pero efectiva.
Las letras tratan sobre los problemas que el vocalista (Chester Bennington) vivió en su juventud. Maltrato, abuso sexual, abuso de sustancias y de alcohol, así como frustraciones, desilusiones y sentimientos de relaciones fallidas.
Se trata de un disco elemental para los que estamos en el límite de los 30 años porque fue el soundtrack del inicio de la adolescencia, un momento en el que empezamos a experimentar las primeras desazones en distintos aspectos de la vida.
Canción necesaria: Points of authority porque nos relata la forma en que desesperadamente tratamos de tomar las riendas de nuestras vidas cuando estamos a la deriva. Una lucha interna constante contra nosotros mismos.