Si estás empeñado en mantenerte hidratado en nombre de una tez radiante, lo siguiente puede sorprenderte: beber agua no repone la piel seca, al menos no de la forma en que te han hecho creer.
Renée Rouleau, esteticista, que cuenta con Demi Lovato y Lili Reinhart como clientes, recurrió a Instagram para disipar lo que ella llama el mito número uno de la hidratación de la piel: que el agua potable provoca una piel hidratada y de aspecto elástico. Al contrario, Rouleau dice que consumir agua es en realidad “la forma menos eficiente de hidratar la piel”.
En pocas palabras, el agua que ingerimos recorre un camino biológico largo y sinuoso y, desafortunadamente, no hay atajos para las células de la piel.
“El agua correrá por los intestinos, será absorbida por el torrente sanguíneo y luego será filtrada por los riñones”, explica Rouleau. “En este punto, hidratará las células dentro del cuerpo”, continúa, “pero esperar que alcance las capas externas de la piel, conocidas como epidermis, simplemente no es posible”. En cambio, la hidratación de la piel es más un problema de las glándulas sebáceas y la barrera de la piel , dijo Dendy Engelman , dermatóloga con sede en la ciudad de Nueva York .
Es mucho para tragar, pero no te deshagas de la botella de agua todavía. Si bien el H2O puede no ser tan eficaz, desde el punto de vista de la hidratación de la piel, es crucial para el funcionamiento óptimo de los órganos, tejidos y linfáticos. Además, dado que todos sus sistemas funcionan juntos, mantenerlos hidratados tiene un efecto de goteo en su apariencia. Otra ventaja estética, según Engleman: “Una hidratación adecuada ayuda a la piel a optimizar la circulación”.
¿En cuanto a lograr una piel húmeda, elástica y acuosa? “La aplicación de hidratación tópica con productos para el cuidado de la piel siempre será la forma más eficaz de rellenar las células de la piel sedientas”, dice Rouleau en un reporte a Well and Good. Para seguir este consejo, busque productos que contengan ácido hialurónico (HA), una molécula amante de la humedad que retiene hasta 1000 veces su peso en agua.