Mucho se habla del cuidado personal y lo cierto es que la imagen que transmitimos al mundo es nuestra carta de presentación. El estilo de cada prenda, los colores, las texturas y accesorios, comparten la información de todo los que nos gusta e interesa.
Por: Natalia Delgado
Más allá de tener bien definida nuestras preferencias, es importante saber si las decisiones que tomamos son acertadas y beneficiosas para nosotras. Desde el corte de cabello, el color o el estampado de una prenda, el modelo de unos jeans o los zapatos, también a qué lugar vamos a asistir y cuál es el impacto que queremos generar.
Achu Ghiglione, experta en asesoría de imagen, nos ofrece una guía práctica para aprender cómo resaltar nuestra belleza natural y así decidir mejor al momento de vestirnos y arreglarnos.
La especialista explica que existen cinco pilares sobre los que se trabajan al momento de realizar un makeover (cambio de imagen). Primero la morfología corporal, en base a esto se determina qué zonas se tienen que destacar y cuáles disimular basados en la ilusión óptica.
Conocerte a vos misma
“Los colores claros expanden y los colores oscuros contraen. Lo mismo pasa con las telas brillosas, expanden, y las opacas contraen. Los estampados grandes ensanchan mucho, entonces, esos son pequeños detalles que tenemos que saber a la hora de comprar con criterio y no ser víctimas del mercado que nos enchufa prendas a través de lo que dicen llamar moda. Lo importante es conocer nuestro cuerpo”, dijo Achu.
Seguido a esto, el estilo. “La gente cree que la asesora de imagen te quiere uniformar, para nada. Nosotras hacemos un test de estilo, que son diez preguntas con diez opciones y ahí salen dos o tres estilos naturales. Gracias a Dios somos todas diferentes y vamos a tener uno que nos va a gobernar, que va a llevar más del 50% de las respuestas, por ejemplo, el estilo clásico”, agrega.
Otro punto que se tiene en cuenta es la colorimetría, un estudio que te ayuda a elegir los colores que mejor te quedan, esto aplica tanto a la ropa, el cabello y el maquillaje. El visagismo, que es la forma del rostro va a indicar el maquillaje: “dependiendo de la forma de tu rostro va a depender qué accesorios y maquillaje te resaltan”, explaya Ghiglione.
Por último, Achu señala el quinto punto, los factores de la edad. “¿En qué momento de la vida estamos? ¿Qué queremos proyectar? ¿Seguridad, confianza, firmeza? Hay que ser ubicadas en la edad, el tiempo y espacio, no porque yo tenga un cuerpo espectacular, muy bien trabajado y tenga 55 años puedo vestir como mi hija”.
Respecto a la planificación del guardarropa, la experta hace alusión a varios puntos, comenzando con nuestra rutina, en qué trabajamos, cuáles son nuestros objetivos personales y luego, los lugares a los que vamos a asistir.
Según puntualiza, la decisión que tomemos sobre nuestro outfit, ya sea por que decidimos algo discreto o llamativo con muchos accesorios, va a tener un punto focal y va a producir un nivel de impacto en quienes nos vean. “Yo creo que menos es más. Creo que una mujer que llama la atención desde la sencillez es una mujer que ya entendió todo”.
Ir de compras es crucial, ya que las decisiones que tomemos tienen que ser en base a los factores antes mencionados y también a que existen prendas que son fast fashion, prácticamente desechables y económicas, así como las low fashion que tienen que ver más con el estilo clásico, combinable y reutilizable.
“Es importante saber comprar, cuando yo sé mi forma de cuerpo, colorimetría y estilo, voy a comprar de forma diferente. En mis clases digo que el conocimiento te brinda opciones, te da criterio y por ende, opinión. Cuando conozco, compro de forma acertada. Cuando yo no sé, me venden lo que quieren”, reflexiona.